sábado, 29 de julio de 2017
…con Bart Johnson.
Otra exclusiva de White Sox Interactive.
Mark Liptak.
Él fue uno de los talentos mas impresionantes que vistió el uniforme de los Medias Blancas. Llegó a las mayores a la edad de diecinueve años. Tuvo juegos seguidos de 12 ponches en septiembre de 1971. La primera vez que lanzó en Yankee Stadium lanzó un juego completo, ganó 5-1 y bateó tres imparables.
Bart Johnson eras un pitcher derecho alto y delgado que lanzaba rectas cortantes. Johnson también podía batear, correr y tenía mucha más habilidad atlética que la mayorías de sus colegas. Pero en sus propias palabras, Johnson estuvo por debajo de sus posibilidades en sus años en South Side.
Las lesiones y la controversia lo rodearon. No todo lo que le ocurría era su responsabilidad. Johnson tenía un fuerte sentido de lo bueno y los malo, era de la generación que aprendió a cuestionar la autoridad. No era suficiente que le dijeran lo que tenía que hacer…La generación de Bart necesitaba saber porqué tenía que hacer eso. Su generación también tendía a no ponerse límites. Si se tenía el talento, la voluntad, se podía hacer cualquier cosa, hasta cambiar el mundo. Para Bart Johnson no había razón por la cual él no pudiera lanzar con los Medias Blancas, cuando no estaba jugando en los jardines. Luego al terminar la temporada jugaba con los Supersonics de Seattle en la NBA. Si.. así de talentoso era.
Luego de retirarse como jugador activo a finales de la década de 1970, Johnson se convirtió en scout y pasó 17 años trabajando con la organización de los Medias Blancas, evaluando talento. Uno de sus hallazgos está sentado ahora en la silla de la gerencia general. Luego trabajó para los Devil Rays por otros diez años en su departamento de búsqueda de talentos. Siempre ha vivido del beisbol.
Hablé con Bart en su hogar en Oak Lawn a principios de octubre. La temporada regular de 2006 había terminado, Dusty Baker había sido cesanteado y él y yo contábamos lo días hasta que empezara el entrenamiento primaveral. Algunas de las cosas que Johnson recordó y dijo, no las había recordado en años. Su honestidad, su humor y su amor por el juego emergieron claramente en las dos horas que pasamos conversando.
ML: Bart, fuiste un tremendo atleta amateur en varios deportes, ¿Por qué decidiste concentrarte en el beisbol y firmar con los Medias Blancas? (Nota del autor: En Torrance High School Johnson tuvo marca de 20-2, en la American Legion 23-2, fue escogido en varios equipos All America de escuelas secundarias y promedió 28 puntos por juego como miembro del equipo de jugadores de primer año del BYU).
BJ: Me decidí por el beisbol porque honestamente pensaba que tenía el talento para convertirme en ganador del premio Cy Young. En baloncesto sin embargo, no iba a dominar, solo sería una pieza del rompecabezas de un equipo de la NBA.
ML: Así que firmas con los Medias Blancas y empiezas en la Midwest League con marca de 16-4, 200 ponches en 170 innings con 2.17 de efectividad. Los Medias Blancas te llaman y el 8 de septiembre debutas en grandes ligas en Seattle contra los Pilotos. ¡Cuéntame de esa noche y que significó para ti estar en las mayores solo 15 meses después de firmar con los Medias Blancas a los 19 años de edad! (Nota del autor: Johnson lanzó seis innings, permitió dos carreras y cuatro imparables. Dio cuatro boletos y cinco ponches mientras perdía 2-1. Conseguiría su primera victoria en las mayores el 16 de septiembre en Chicago, al lanzar 8.1 innings en un triunfo 7-4 sobre los Angelinos).
BJ: Fue una emoción muy grande ponerme el uniforme de los Medias Blancas. Recuerdo haber pensado antes del juego que yo pertenecía allí y estaba convencido de eso. Entonces cuando fui al montículo, me di cuenta que me sentía como en una isla y todos me miraban.
El primer tipo que enfrenté pienso que fue Tommy Harper y lo retiré. El próximo fue Steve Whitaker y me bateó jonrón por el jardín central. Mientas le daba la vuelta al cuadro, mi cátcher Eddie Herrmann vino a hablar conmigo y me dijo que Whitaker era un bateador de rectas. Recuerdo pensar, ¿por qué no me dijiste eso antes que él viniese a batear? (risas). Lo otro que recuerdo es que Luis Aparicio cometió un error y él no hacía eso a menudo. Fue el mejor campocorto con quien jugué.
De mi primer triunfo recuerdo dos cosas. En ese juego bateé un imparable, anoté una carrera, empujé otra, negocié un boleto y robé una base. Así que llené muy bien la columna de las estadísticas. Lo otro que recuerdo es que Steve Kealey salió a pitchear por los Angelinos. Él se crió a unos 100 metros de mi casa en Torrance y jugamos en el equipo de la secundaria. Fred Kendall, el papá de Jason, también estaba en ese equipo. Así que teníamos tres tipos que llegaron a las grandes ligas. (Nota del autor: Kealey sería cambiado a los Medias Blancas y sería compañero de equipo de Johnson otra vez en 1971, 1972 y 1973).
ML: Luego de esa demostración de 1969, había grandes esperanzas de que ingresaras a la rotación de abridores y estuvieses con el equipo desde el inicio de la temporada de 1970, pero eso no ocurrió. Te enviaron a las menores y no regresaste al equipo hasta mediados de mayo. ¿Se debió eso a una lesión?
BJ: No había lesión, pero yo había lanzado muchos innings en 1969. Si observas los registros de las ligas menores y la liga invernal, gané como 30 juegos. Ese invierno Luis Aparicio me preguntó si podía jugar con él en Venezuela. El sueldo era muy bueno y me gustaba mucho jugar beisbol, así que lo hice. Tuve marca como de 12-3. Cuando regresé al entrenamiento primaveral sentía el brazo rígido. Los Medias Blancas pensaron que el clima caliente ayudaría a soltar mi brazo por lo cual me enviaron a Mobile y después a Tucson, para ponerme en forma.
ML: Sé que apenas eras un niño que había estado con los Medias Blancas en partes de las temporadas de 1969 y 1970, pero esos fueron años duros para la franquicia. ¿Te molestaron todas esas derrotas, como ocurría con los veteranos, o aun así era una alegría estar en las mayores así fuese con un equipo malo? (Nota del autor: En 1969, los Medias Blancas tuvieron marca de 68-94, en 1970 alcanzaron la peor marca de la franquicia, 56-106.
BJ: Yo tenía un objetivo. Trataba de ganar. No me daba cuenta de las otras cosas que ocurrían en las grandes ligas, especialmente de los veteranos…el desempeño del equipo, esas cosas. Esos tipos eran mucho más viejos que yo.
ML: El día inaugural de 1971 los Medias Blancas están en Oakland. El dueño de los Atléticos, Charlie Finley organiza el primer doble juego inaugural de la historia al considerar que su equipo le puede pasar por encima a los tristes Medias Blancas y así arrancar con buen pie. Pero con Chuck Tanner ese no es el mismo equipo. Ustedes ganaron el primer juego 6-5, y entonces zarandearon a los Atléticos 12-4 en el encuentro nocturno. Abriste el segundo juego y ponchaste nueve en trabajo completo. Cuéntame un poco acerca de Chuck. ¿Como fue capaz de cambiar la actitud y percepción del equipo casi de la noche a la mañana?
BJ: Chuck lo hizo porque era muy optimista. No toleraba la negatividad. Lo otro era que llevaba los mejores jugadores al norte cada año, sin importar que tan viejos eran. Recuerdo que Chuck también podía intimidar a los peloteros. Tenía 42 años de edad o algo así, y era un tipo grande. Si hacías algo mal o lo hacías molestar, te llamaba al clubhouse y ajustaba cuentas contigo.
Y eso no era solo con los peloteros. Recuerdo una vez que uno de los periodistas escribió algo de nosotros citando a peloteros de manera anónima y Chuck quería saber quien había hecho los comentarios. Nos llamó a los camerinos y nos preguntó sobre eso. Nadie admitió que había dicho nada, así que llamó al periodista a su oficina. Estábamos sentados ahí y oímos un tropel de cosas tiradas, bang, bum, crac. El periodista salió llorando como un niño pequeño. Chuck estaba tratando de averiguar si uno de los peloteros había dicho algo o si el periodista estaba inventando. Pienso que responsabilizó al periodista.
ML: Acerca del juego en sí, ¿Recuerdas algo en particular?
BJ: Bien, ¡de inmediato recuerdo que a Carlos May se le olvidó pisar el plato! (Nota del autor: En el primer inning de ese segundo juego, May largó lo que pareció ser un jonrón por el jardín derecho, ¡solo que en la celebración en el plato, Carlos no pisó el pentágono! Los Atléticos se dieron cuenta, apelaron la jugada y May fue sentenciado out. El batazo fue anotado como triple impulsor de dos carreras)
ML: El día inaugural es especial para mí y muchos aficionados al beisbol pero ¿es igual de especial para ustedes quienes participan en el juego? ¿O es solo el inicio de una larga temporada de 162 juegos?
BJ: No, es especial. Me gustaba el día inaugural en casa. La multitud en las tribunas y es tan temprano en la temporada que no hay mucha presión, los fanáticos no se meten contigo y nunca sabes que va a ocurrir.
ML: Esa temporada ganaste 12 juegos Bart, salvaste 14, con 153 ponches en 178 innings. Tu efectividad fue 2.93. ¿Eras abridor o relevista? ¿te molestaba la dualidad de funciones?
BJ: Entonces no teníamos especializaciones y no me veía yendo a preguntarle a Chuck ¿Cuál es mi trabajo aquí? ¡Si hacía eso me cortaban la cabeza! (risas). Empecé esa temporada como abridor y entonces Wilbur Wood empezó a a abrir juegos y fui enviado al bullpen. Recuerdo un juego donde conseguí el salvado para Wilbur Wood y creo que lancé cuatro innings. (Nota del autor: El 22 de agosto de 1971 Johnson salvó un juego para Wood al lanzar 3.2 innings de relevo en Cleveland. Esa temporada Bart también tuvo otros tres salvados donde lanzó al menos tres innings)
ML: Pregunté por el cambio de funciones porque muchos aficionados de los Medias Blancas señalan como quizás Brandon McCarthy fue afectado al ser mudado al bullpen en 2006, luego de haber sido pitcher abridor toda su vida. ¿Existe un esquema mental diferente entre iniciar un juego y entrar a este una vez empezado? Recuerdo un comentario de Jack McDowell donde decía, que no importaba si eras abridor o relevista, tu trabajo cuando estás en el montículo es hacer outs.
BJ: Bien, no puedo hablar por Brandon y estoy de acuerdo con la declaración de Jack, tienes que dar lo mejor de ti en el montículo. Pero pienso que eso depende de tu enfoque. Si un tipo juega todos los días puede ser duro si pasas mucho tiempo sin jugar. Cuando yo era abridor encontraba el beisbol aburrido. No me acostumbraba a la idea de jugar solo cada cuatro o cinco días. Me gustaba más el bullpen. (Nota del autor: Wilbur Wood hizo exactamente el mismo comentario en su entrevista con White Sox Interactive, lo cual explica porque estaba dispuesto a iniciar juegos cada tres o hasta dos días).
ML: Algo más que ocurrió en esa temporada de 1971 fue inusual. El 31 de mayo, día de los caídos, en el octavo inning del segundo juego contra Baltimore en Comiskey Park, golpeaste a Don Buford con un envío. Buford se dirigió al montículo con el bate en la mano. ¿Puedes contarnos lo que ocurrió? (Nota del autor: Luego en el noveno inning, con Buford en el circulo de prevenidos al bate, fue asediado por un fanático, luego de intercambiar palabras con otro fanático que estaba en los palcos de terreno. Los Orioles salieron del dugout y atacaron al segundo fanático, según palabras del segunda base de los Medias Blancas, Mike Andrews).
BJ: Él me bateó un jonrón temprano en el juego y yo iba a tumbarlo. Terminé golpeándolo en la espalda y él avanzó hacia el montículo con el bate en la mano. Yo había visto el juego donde Juan Marichal golpeó a John Roseboro en la cabeza con un bate, así que empecé a retroceder lejos del montículo. Frank Robinson salió del dugout, lo agarró y trató de persuadir a Buford de hacer algo que ocasionara una gran suspensión. Mientras todo esto ocurría yo le lamcé un golpe a Buford lo cual me complicó con los Orioles.
Yo había salido del juego cuando el fanático fue buscar a Don, así que no vi lo que ocurrió. He oído a través de los años que el tipo era un gran fanático de los Blackhawks y era peleador. Pude haberlo conocido alguna vez pero no lo recuerdo claramente.
ML: En la temporada de 1972, acortada por la huelga de peloteros, empezaste en el bullpen. Ese primer fin de semana en Kansas City cargaste con dos derrotas en extrainning en días seguidos, no parecías tú ese año. Tuvo eso algo que ver con alguna perturbación mental, había una lesión? Porqué el 3 de junio te enviaron a las menores y nunca regresaste. (Nota del autor: La temporada corta de Johnson fue determinada por el juego del 3 de junio. Como relevista ante los Yanquis, Bart permitió ocho carreras (tres limpias), con cinco boletos en dos innings durante una derrota 18-10 en casa).
BJ: Se suponía que yo fuese lo que ahora se denomina el cerrador de los Medias Blancas ese año y me apunté dos derrotas en 18 horas. Estaba adolorido. Me lastimé la rodilla derecha jugando baloncesto en el receso entre temporadas. De inmediato se lo comuniqué a los Medias Blancas y ellos me examinaron y dijeron que la rodilla estaba bien pero que me había roto un cartílago. Me rehabilité lo mejor que pude pero cuando salí a pitchear no podía lanzar la pelota. Cuando me dijeron que me iban a bajar, yo no quería ir porque ellos fueron quienes dijeron que la rodilla estaba bien. Dijeron que si no acataba la decisión sería suspendido, así que regresé a Appleton. Terminaron operándome la rodilla ese septiembre.
ML: Era hora de que le dijeras a los Medias Blancas que tal vez sería mejor si te convirtieras en jardinero. Sé que te gustaba batear y eras muy bueno en eso. (Nota del autor: El 12 de agosto de 1970, Johnson bateó tres imparables en un triunfo 5-1 en Nueva York). Pero honestamente ¿piensas que a los 22 años de edad hubieses hecho la transición y regresado a las grandes ligas?
BJ: Seguro. Siempre pensé que podía batear. Tenía esa confianza. No dudaba que podía batear lo suficientemente bien para regresar a las mayores como jardinero. Pero los Medias Blancas estaban empeñados en que siguiera siendo pitcher. Me dijeron que nunca batearía con suficiente poder para ser considerado más que un cuarto jardinero. Recuerdo que la noche después que me dijeron eso, bateé una pelota en Appleton que salió del estadio y la encontraron en el estacionamiento de una iglesia. La pelota tuvo que viajar alrededor de 450 pies. Yo tenía suficiente poder, también sabía cuando no me estaban diciendo la verdad.
ML: Subiste por poco tiempo en 1973 y luego lanzaste en el entrenamiento primaveral de 1974. Sin embargo los Medias Blancas dijeron que te enviarían de vuelta a las menores. No tomaste de buena manera esa información y dijiste que te ibas a retirar. Hablaste de hacer trabajo de publicidad para los Fire de Chicago de la WFL. (Nota del autor: La fugaz World Football League que solo duró dos años) y luego en julio ibas a probarte con los Supersonics de Seattle de la NBA. El retiro no duró mucho pero me pregunto si me puedes hablar de lo que había en tu mente para ese momento.
BJ: Puedes sentir la negatividad a tu alrededor cuando las cosas salen mal. Esa primavera solo lancé como cinco innings. No me estaban utilizando. Más adelante en la primavera me dijeron que querían que fuese abridor, que esa era mi oportunidad para hacer el equipo. Así que no iba a decir no. No había pitcheado lo suficiente.
Salgo y lanzó cinco o seis innings en blanco. Y me dejan seguir. Recuerda que no había lanzado mucho esa primavera…Estoy convencido de que si el juego hubiese durado 13 innings me hubiesen mantenido en el montículo. Al final permití cinco carreras y después que el juego terminó, me dijeron que me enviarían a las ligas menores. Eso fue todo, yo sabía cuando me estaban tratando mal. Dije que no iría a las menores y me fui a casa. Despues de un mes con poco dinero, cuando la realidad se decantó, me reporté a las menores.
No sé si trabajar con los Fire fue realmente una opción pero quería hacer algo hasta que llegara julio para ir al entrenamiento con los Supersonics. El año previo había ido a uno de sus campamentos. Bill Russell era el entrenador principal y lo hie tan bien que me pidieron que asistiera al campamento de entrenamiento completo. Yo sabía que tenía la oportunidad de quedar en el roster definitivo del equipo.
ML: Para tu crédito Bart, te reportaste a las menores y te llamaron al equipo grande en la segunda mitad de 1974, donde estuviste impresionante, 10-4 en 18 juegos con efectividad de 2.74. Parecía como que tal vez habías dado la vuelta en la esquina. ¿Qué estabas haciendo diferente?
BJ: Pienso que era el hecho de que yo era más maduro. También tenía un enfoque más positivo en el montículo. Me había concentrado en hacer lo que debía para aprovechar mis oportunidades, empecé a leer libros sobre el poder del pensamiento positivo y tener un enfoque mental positivo.
ML: A pesar de esa gran segunda mitad, no lanzaste un inning para los Medias Blancas en 1975. ¿Estabas lesionado?
BJ: En el entrenamiento primaveral fui designado como el segundo abridor detrás de Wilbur (Wood). Jugamos un partido ante los Rojos donde llovió todo el día pero ellos querían jugar porque había unas 8000 personas en las tribunas. Finalmente empezamos como a las cuatro de la tarde. (Nota del autor: Los juegos vespertinos del entrenamiento primaveral usualmente empiezan a la 1 pm). El campo era un lodazal. Le estaba pitcheando a Joe Morgan cuando mi pierna izquierda se resbaló mientras hacía un lanzamiento, mi espalda sufrió un templón y me hernié un disco de la columna vertebral. Era la misma lesión que sufrió Bill Melton en 1972.
Las cosas empeoraron porque los Medias Blancas viajaron a la costa oeste para jugar ante los Atléticos y el vuelo se paraba en todas partes. En lugares como Yuma (Arizona), San Diego, Los Angeles y luego hacia arriba hasta San Francisco. Cuando llegamos no podía bajar del avión por el dolor de espalda. Estuve en el hospital por unos diez días con tratamiento de tracciones, después se dieron cuenta de que eso no me hacia bien. La cama del hospital era muy pequeña para mi, mis talones pegaban del extremo de la cama, lo cual contraía mi columna y la tracción era inútil.
ML: En 1976 estaba de vuelta en el equipo y efectuaste la mayor cantidad de aperturas de tu carrera: 32. Los Medias Blancas de 1976 fueron un equipo muy malo, bajo esas circunstancias tu marca de 9-16 no era tan mala. (Nota del autor: Los Medias Blancas de 1976 estaban tan necesitados de pitcheo abridor que convirtieron en abridor a Goose Gossage, el relevista del año en 1975. Tuvo marca de 9-17…y ¡fue al juego de estrellas!!) ¿Cómo era jugar para un equipo cuyo dueño era Bill Veeck?
BJ: Bill estuvo bien aunque me cansé de sus excentricidades. Creo en la pureza del juego y para mi sus cosa eran difíciles de aceptar en el momento. Por ejemplo, estaba calentando antes del juego en los alrededores del terreno cuando había que para lo que estaba haciendo para que pasara un desfile de muchachitos de las pequeñas ligas. O tratabas de soltar los músculos y un grupo de motociclistas aparecían en la zona de seguridad levantando polvo y
despidiendo rocas alrededor. ¡Aun recuerdo ese juego que efectuamos ante los Orioles en pantalones cortos!
Me gustaba Bill Veeck, pensaba que era un gran tipo.
ML: En 1977, tu año final en las mayores, fuiste parte de uno de los equipos más queridos de los Medias Blancas de todos los tiempos, los Southside Hitmen. Te preguntaré, como lo he hecho con algunos de los muchachos con quienes jugaste esa temporada, ¿hubo algun indicio en la primavera de que ese equipo sería tan bueno como fue? (Nota del autor: Los Medias Blancas de 1977 fueron pronosticados para terminar no más arriba del cuarto lugar de la división, sorprendieron al beisbol al ganar 90 juegos, lideraron el oeste hasta finales de julio y despacharon una marca del equipo para ese momento, 192 jonrones).
BJ: No. Pero eso fue porque para ese momento no sabíamos que tan buen bateador era Oscar Gamble. No sabíamos de la determinación que tendría Eric Soderholm para regresar de las lesiones. Empecé la temporada como abridor pero fui al bullpen en el transcurso del año. Algo que recuerdo de ese año fue que le permití un gran batazo a Carlos May. (Nota del autor: El 2 de agosto de 1977 en Comiskey Park, Johnson recibió un jonrón de tres carreras de May quien jugaba para los Rangers de Texas. El jonrón vino después de un error de Jack Brohamer que mantuvo vivo el inning. Texas anotó seis carreras en el octavo inning y terminó ganando 9-8, después que los Medias Blancas ganaban 7-0).
ML: Observando esa temporada en retrospectiva, ¿recuerdas una jugada, o un juego, o algo que hiciera a todos detenerse y pensar, sabes, no somos un equipo malo?
BJ: No que yo recuerde, pero pienso que Oscar Gamble fue una gran parte de la razón por la cual jugamos tan bien. Era un bateador profesional con una tremenda confianza en si mismo. Recuerdo un juego primaveral donde Oscar bateó un sencillo. Cuando el inning terminó, regresó al dugout diciendo…condenado sencillo…¡soy un bateador de jonrones!
También recuerdo una vez esa primavera cuando estábamos zarandeando a un pitcher. Oscar estaba en el dugout diciéndole a todos, ¡tranquilos, tranquilos, queremos que el equipo recuerde a este tipo! (Risas) Oscar no podía esperar para enfrentar a ese tipo cuando empezó la temporada.
ML: Una de las cosas que definía la relación de cariño entre los aficionados y el equipo eran las demostraciones de apoyo por ustedes. Las peticiones para que los peloteros salieran del dugout cada vez que daban un gran batazo, Nancy Faust con la canción Na Na Hey Hey. Hoy son asuntos sin importancia pero entonces eso fue controversial ¿cierto?
BJ: Si lo fue. Pienso que eso fue más controversial para los pitchers que para los bateadores.
ML: ¿Cuál fue la reacción de los muchachos a toda esa algarabía? Me han dicho que a algunos de los peloteros no les importaba ese tipo de cosas, salir después de un jonrón para agradecer al público, ¿fue cierto?
BJ: Yo estaba en el bullpen en ese momento así que no me sentí mal por eso. Sin embargo, para los bateadores, era como pedirles que se pusieran en evidencia.
ML: Hacia finales de julio, los Medias Blancas jugaban muy bien, llegaron a tener 6 juegos de ventaja sobre los Reales y los Mellizos cuando vinieron de atrás para ganar un tercer juego seguido contra Kansas City. Pero los Reales destrozaron a los Medias Blancas en el segundo juego de la doble cartelera de ese domingo y empezaron a ejecutar juegos psicológicos. Hal McRae trotó lentamente las bases y se tocó la gorra hacia los aficionados de los Medias Blancas cuando tocó el plato. Amos Otis y Jim Colborn hablaron barbaridades de cómo ustedes alardeaban y no habían ganado nada. Ustedes no habían hecho nada. Me refiero a que los aficionados eran quienes demandaban que los peloteros salieran ¿cierto? Estuve en uno de esos juegos donde la multitud era tan bulliciosa que el juego no podía seguir hasta que Richie Zisk u Oscar Gamble o Eric Soderholm saliera a agradecer a los aficionados. ¿Por qué los Reales decían que ustedes instigaban todo eso?
BJ: Ellos usaban eso como una motivación, sabían que nosotros no éramos los autores de eso. Conoci bien a Hal McRae porque trabajamos para los Devil Rays y hablamos de eso varias veces. No jugábamos tan mal, pero los Reales arrancaron y vencieron a todos. (Nota del autor: Desde el primero de agosto los Reales tuvieron marca de 46-17 hasta finalizar la temporada. También tuvieron una seguidilla de 16 victorias en ese período). Además no pìenso que los aficionados de los Medias Blancas fueron los que empezaron a pedir que los peloteros salieran del dugout. Recuerdo ver a los aficionados de Minnesota hacer eso con Rod Carew. Recuerdo que esa fue la temporada cuando casi bateó .400 y después que se embasaba o tenía un turno al bate, sus seguidores le pedían que saliera. Y si, ¡a los Reales también les molestaba eso!
ML: La semana siguiente los Medias Blancas tuvieron una serie crucial en Kansas City. Esa serie tenía mucha carga emocional y estabas en medio de ella. El 5 de agosto, en un juego que los Reales ganarían 12-2, fuiste a relevar a Chris Knapp. En un roletazo bateado por el difunto Darrell Porter, fuiste a cubrir primera base y Porter te golpeó en la espalda cuando tocaste la base. Dick Howser tuvo que correr desde la caja de coach para separarlos. Luego en el sexto inning, después que John Mayberry roleteó para terminar el inning, tú y Porter tuvieron unas palabras en el plato. ¿Qué ocurrió? ¿Es cierto que le dijiste mientras él se preparaba para recibir los envíos de calentamiento, quieres pelear ahora?
BJ: Si, eso es verdad. Le dije algo como, podemos darnos unos golpes ahora o después. Lo que ocurrió fue que temprano en el juego Jim Spencer lo había golpeado, así que cuando el bateó ese roletazo se desquitó conmigo. Yo me había operado recientemente de la espalda y no me gustó que me golpeara con el codo en medio de la espalda. Después que Mayberry roleteó, Porter iba hacia el plato, me le acerqué y le hice mi comentario. Él se quitó la máscara, lo cual agradecí, y lo golpeé. Algo que recuerdo es que sus ojos se pusieron muy grandes. Estaba impresionado, seguro.
Despues del juego él y George Brett fueron a nuestro clubhouse y se disculparon conmigo por lo que había pasado.
ML: Los Medias Blancas fueron barridos en esa serie y nunca fueron los mismos después. Fue casi como si los comentarios de los Reales acerca de los aficionados de los Medias Blancas y de no ganar nada los hubiese afectado. ¿Jugó bien el equipo después que empezó la controversia?
BJ: Pienso que fue una combinación de factores. No éramos tan buenos como jugamos al principio de la temporada y no éramos tan malos como jugamos al final. No se trata de que jugamos por debajo de .500 o de manera miserable, se trata de que los Reales fueron sorprendentes. Ganaron 16 juegos seguidos y algo como 31 de 36. No puedes contra eso.
ML: Tu relación con los aficionados era interesante. Quizás debido a tus dificultades o a la publicidad que a veces generabas, pienso que ellos no sabían que hacer contigo. Recuerdo cuando el grupo de fanáticos de los Medias Blancas del jardín izquierdo desplegó aquella pancarta que decía, ¡Oh, no! ¡Bart no! Tenías que haber visto eso…¿Cómo te hizo sentir eso?
BJ: Antes fui abucheado y fui convertido en blanco, así que estaba acostumbrado a eso. Nunca vi esa pancarta en vivo, aunque después la vi en fotografías. Los fanáticos a quienes conocía y con quienes hablaba eran viciosos o maliciosos así que tomé la pancarta como algo punzante. Los fanáticos siempre fueron buenos conmigo cuando firmaba autógrafos antes de los juegos. También pienso que parte de la razón por la cual los fanáticos hacían eso, era porque yo era un muchacho californiano, pretencioso y había ido a la universidad.
ML: 1977 fue el último año que jugaste con los Medias Blancas, te despidieron en abril de 1978. ¿Por qué decidiste retirarte?
BJ: Bien, en realidad firmé con Oakland luego que los Medias Blancas me dejaron en libertad y jugué para su equipo de Vancouver en las ligas menores. Entonces, cuando Chuck Tanner se convirtió en manager de los Piratas en 1979, entrené con ellos. Me enviaron a la liga mexicana y lancé allí hasta que estalló una huelga. Recuerdo que me pagaron, puse el dinero en mis zapatos y me fui. Nunca regresé.
ML: Que hay de tu vida después del beisbol, Bart. Se que has sido scout, evaluador de talento por al menos una parte de ese tiempo.
BJ: Roland Hemond me llamó y me ofreció una posición en el departamento de escauteo y la tomé. Pienso que Roland hizo eso porque él era el gerente general cuando me secaron en aquel entrenamiento primaveral de 1974. Roland puede haber sentido que fui subestimado, así que me dio una oportunidad y lo aprecié. Trabajé con los Medias Blancas desde 1980 hasta 1997.
El tipo más grande que evalué y firmé sería Kenny Williams. Kenny era futbolista en Stanford y todos decían que se olvidaran de él porque iba para la NFL. Pero cuando lo vi jugar me emocioné con sus habilidades y se lo hice ver para tratar de convencerlo de jugar beisbol.
Entonces fui a trabajar con los Devil Rays y estuve con ellos hasta este pasado septiembre cuando me dejaron ir junto a otro grupo de scouts. Decidieron optar por un sistema de escauteo computarizado. Despues de ser despedido, Kenny me llamó para decirme que sentía lo que había ocurrido. Eso fue agradable de su parte. Fue el tipo de más rango en el beisbol quien me contactó después que eso ocurrió.
ML: Aún vives en Oak Lawn por lo cual estás justo en el medio del país de los Medias Blancas. ¿Qué tal fue estar en la ciudad durante la carrera por el campeonato en 2005?
BJ: Fue maravilloso. Estaba muy feliz por algunas de las personas quienes estaban en la organización. Estaba orgulloso y feliz por Kenny y estaba feliz de que tenía una asociación con él por su carrera beisbolera. También hubo un toque de celo. Cuando los Medias Blancas recibieron sus anillos de Serie Mundial, pensé cuan maravilloso habría sido lograr uno.
Al ver los playoffs recuerdo que hubo un juego donde Fox hizo una gráfica acerca de cuando fue la última vez que los Medias Blancas tuvieron cuatro abridores que lanzaron juegos completos seguidos. Joe Buck estaba hablando de eso y eso ocurrió en agosto de 1974. Me sentí muy orgulloso de ser parte de eso. (Nota del autor: Eso ocurrió desde el 21 de agosto hasta el primer juego de la doble cartelera del 25 de agosto de 1974. Los pitchers de los juegos completos fueron Wilbur Wood (derrota), Jim Kaat (victoria), Bart Johnson (victoria) y Wood de nuevo (victoria)).
ML: Algo por lo cual siempre me he preguntado. Como aficionado sé como me pongo cuando comparto con peloteros de los Medias Blancas o hablo con ellos así sea por teléfono. Vuelvo a ser un niño. ¿Pero que ocurre con los peloteros? ¿Has vivido una situación donde has conocido a uno de tus héroes o a un pelotero que admirabas, como manejas eso?
BJ: Lo viví. Una vez jugamos el Juego de la Semana y fui nombrado pelotero más destacado del juego. Estoy en el clubhouse cuando alguien me dice que tengo que regresar al terreno porque Sandy Koufax quiere entrevistarme. Pienso, caramba ¡Sandy Koufax! Crecí viéndolo pitchear con los Dodgers. Así que salgo con la esperanza de hablar unos minutos con Sandy. En lugar de eso, debido a las restricciones del tiempo, todo lo que él hace es decir y ahora aquí está el pelotero más destacado del juego, Bart Johnson…¡felicitaciones! Felicitaciones para ti también. (risas). Entonces doy la vuelta para regresar al clubhouse y cuando él está saliendo del terreno le oigo decirme, ¡Bart… usa más tu recta!
ML: También me estabas contando una historia de baloncesto acerca de jugar contra Dusty Baker. ¿Te importaría repetirla?
BJ: Estábamos participando en el juego de exhibición del Salón de la Fama ante los Bravos. (Nota del autor: 12 de agosto de 1974. Bravos 12, Medias Blancas 9) Si has estado allí, sabes que el lugar tiene todo…campos de beisbol, canchas de baloncesto, piscinas. Empecé el juego y me sacaron luego de unos innings. Voy a las cancha de baloncesto con Terry Forster y Goose Gossage y empezamos a lanzar el balón. Dusty viene con un par de peloteros de los Bravos y dice, ¿quieren jugar?
Jugamos y los vencemos por un buen margen. Pienso que Dusty estaba algo sorprendió de que le hubiésemos ganado así. Tal vez nos subestimó. Jugué baloncesto en la universidad y practiqué con un equipo profesional, así que sabía que podía jugar.
ML: ¿Cómo eran Goose y Terry como baloncestistas?
BJ: Goose era bueno y Terry muy bueno. Él jugó baloncesto en la secundaria en Southern California. De hecho jugó contra Bill Walton porque ambos eran de la misma zona. Terry me contó la historia del juego que jugó contra Bill.
Terry era muy bueno y tenían un buen equipo cuando jugaron contra el equipo de Bill. El equipo de Terry salió adelante, y Terry, me dijo que anotó los primeros dos puntos del juego. Mientras Terry me cuenta eso, dice que piensa para sus adentros, el equipo de Walton no es tan fuerte. Podemos jugar con estos tipos…El equipo de Walton falla un lanzamiento, Terry toma el rebote y avanza con el balón a través de la cancha. Decide saltar y lanzar desde unos cuatro metros. Y Walton atrapa el lanzamiento. ¡Lo detiene en el aire! (risas). ¡Se acabó el juego! Los árbitros estaban sorprendidos como todos. El equipo de Walton se acreditó el juego.
ML: ¿Podrías resumirme tu tiempo en South Side, a través de los buenos y los malos momemntos?
BJ: Recuerda que cuando firmé con los Medias Blancas ellos eran el enemigo para mí, cuando eran un muchacho vi la serie de 1959 cuando los Medias Blancas vinieron a Los Angeles. Ahora es un hecho que he vivido mucho más de mi vida en Chicago de lo que viví en California. Soy más un tipo de South Side que un tipo de California. Siempre respeté a los aficionados de los Medias Blancas y su conocimiento del juego.
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Nota del editor: Mark Liptack es un experimentado periodista deportivo, con varios galardones por su trabajo en los medios electrónicos e impresos. Ha ocupado numerosas posiciones en la fuente deportiva para varias organizaciones televisivas y periodísticas, incluyendo director de deportes para KNOE-TV (Monroe Louisiana) y KPVI-TV (Pocatello, Idaho), y periodista deportivo para Idaho Falls Free Press, donde su columna “Lip Service” ha aparecido por muchos años. “Lip”, su esposa, y sus gatos, viven en la actualidad en Chubbuck, Idaho.
Traducción: Alfonso L. Tusa C.
domingo, 23 de julio de 2017
Dwight Evans acerca del Salón de la Fama del beisbol: No entiendo la mentalidad de la votación.
Graham Womack. 22-03-2016.
Cooperstown Chances examina el caso del Salón de la Fama del beisbol de un candidato cada semana. Esta semana: Dwight Evans.
Quien es él: La palabra ha estado abierta acerca de Dwight Evans por años. El pionero de los sabermétricos, Bill James escribió una carta abierta en 2012 solicitando el ingreso de Evans al Salón de la Fama. Adam Darowski incluyó a Evans en su Salón de las Estadísticas.
“No se trata de que Dwight Evans fuese un bateador excepcional. Su WAR de carreras producidas de 352.7 (Baseball Reference) ha sido alcanzado o sobrepasado por otros 89 peloteros. Sus destrezas defensivas no fueron tan únicas, 194 peloteros tienen un WAR de carreras defensivas mayor que el 66.3 de Evans. Pero solo 18 peloteros en la historia del juego lo han sobrepasado en ambas categorías”.
Hay 44 jardineros en el Salón de la Fama, para la herramienta Index Play de Baseball Reference.com, si Evans fuese a ser ingresado mañana al Salón de la Fama, el jardinero derecho de los Medias Rojas de Boston por mucho tiempo sería lo que Brian Kelly llamaría un inquilino del Salón de la Fama de clase media. Mientras el OPS+ de 127 de Evans lo igualaría en el lugar 34 entre los mejores jardineros del Salón de la Fama, sus 66 carreras salvadas a la defensiva lo ubicaría en el décimo lugar general, sus 66.9 Win Above Replacement ocuparían el puesto 18.
Estadísticamente, Evans es mejor que varios inquilinos del Salón de la Fama, aunque tal vez no tenga su brillantez. Obtuvo su votación más alta con 10.4 por ciento del voto de la Baseball Writers Association of America para Cooperstown en 1998 y tiene pendiente una elección en el Expansion Era Committee para el cual es elegible desde 2013. Es incierto si Evans será considerado para esa elección cuando el grupo se reuna este otoño.
“Siempre pensé que estaba en la cúspide con mi habilidad ofensiva y que mi defensa contribuiría con eso, pero no lo hizo”, le dijo Evans a Sporting News. “Eso solía molestarme, pero ya no”.
Evans reserva buena parte de su ira para lo que muchas personas aún llaman el comité de veteranos. El Salón de la Fama dividió el comité en tres subgrupos en 2010, para cubrir épocas diferentes. Pero para muchas personas, sigue existiendo el bloqueo intransigente que ignora a peloteros como Dale Murphy, Jim Kaat, y Luis Tiant. Evans ha hablado con muchas personas involucradas acerca de que él tiene una idea de lo que hay detrás de esa situación.
“Muchos peloteros del Salón de la Fama no quieren que nadie llegue a través del comité de veteranos”, dijo Evans. “No quieren que llegue nadie”.
A Evans le gustaría ver ingresar a Murphy, Tiant y Kaat. Él sabe que Murphy bateó casi 400 jonrones vitalicios y ganó dos premios al jugador más valioso, Kaat llegó muy cerca de las 300 victorias. De Tiant, a quien ve a menudo, Evans hizo ver que sus estadísticas son muy similares a las de Catfish Hunter. Todos se quedaron cortos ante la BBWAA (Asociación de periodistas de beisbol) y podrían ser candidatos del comité por mucho tiempo.
“No entiendo la mentalidad de la votación”, dijo Evans. “No logro descifrarla”.
Oportunidades de llegar a Cooperstown: 40 por ciento.
¿Por qué?: Evans pertenece a un grupo de peloteros a quienes los comités de la Expansion Era y la Golden Era al menos le rendirá honores pocas veces en los próximos 10 o 15 años. El punto es si Evans será considerado con más méritos para el Salón de la Fama que candidatos como Dick Allen, Jack Morris, y Tony Oliva. Dado que el caso de Evans se basa mucho en la sabermetría y que los comités del Salón de la Fama no parecen considerar las estadísticas avanzadas en este momento, eso parece poco probable.
Por supuesto que las cosas pueden cambiar, y peloteros como Evans y Bobby Grich podrían ser buenos casos para probar eso. Pero si el Salón de la Fama ha demostrado algo repetidamente a través de su historia, es que a menudo se mantiene glacial ante los cambios. Esto no pinta bien para Evans, quien cumplió 64 años en noviembre, en el sentido de que pueda disfrutar ese honor en vida.
Evans tiene muchos factores que lo hacen subestimado. Algunos son aleatorios. Si el sexto juego de la Serie Mundial de 1975 no hubiese terminado con el dramático jonrón de Carlton Fisk, más personas hablarían de la atrapada salvadora de Evans ante un batazo con características de jonrón en el octavo inning. Y Fisk fue solo uno de muchos compañeros de equipo icónicos en Boston.
“Jugué con muchos tipos: Fisk, Yaz, Boggs, Lynn”, dijo Evans. “Estaba a su sombra, pero eso está bien. Eso es bueno para mí…No buscaba notoriedad. No me importaba eso. Cuando salía por la puerta trasera del clubhouse y me iba a casa para estar con mi familia, con mis hijos, eso era lo más valioso para mí”.
A través de los años, Evans ha sido comparado con Jim Rice, quien fue ingresado en 2009 en su décimoquinto intento con la BBWAA. Cuando le preguntaron si él pensaba que Rice pertenecía al Salón de la Fama, Evans dijo, “Absolutamente lo creo, seguro”. Sin embargo Evans notó la diferencia clave entre él y Rice, la cual ha hecho su caso más difícil: Rice empezó con brillantez y terminó con un declive, mientras Evans inesperadamente se hizo mejor pelotero con el calendario.
Él da crédito parcial de esto a Ralph Houk, quien se convirtió en manager de los Medias Rojas en 1981.
“Él me llamó a su oficina en Winter Haven y dijo, ‘¿Sabes qué? He estado mirando tus estadísticas. Tienes mejor porcentaje de embasado que cualquiera en la alineación’, para nuestra alineación de ese momento”, dijo Evans. “No sabía eso, pero él era el manager, y esas son cosas que el debía examinar, nadie hablaba del porcentaje de embasado. Ël me dice, ‘Te voy a colocar de segundo en el orden para que tomes un turno adicional por juego. Eso te daría la oportunidad de embasarte una vez más’. Fui a su oficina sin saber lo que me iba a decir. Salí de ahí con tres metros más de estatura”.
Evans bateó .282 con .387 de porcentaje de embasado y .509 de porcentaje de slugging durante la estadía de Houk en Boston, la cual duró hasta el final de la temporada de 1984. Tuvo dificultades en el segundo turno de la alineación en 1985 y rara vez bateó allí por el resto de su carrera, la cual terminó en 1991.
Otro factor que juega contra Evans: Tuvo su mejor temporada en 1981, el año recortado por la huelga, cuando las disputas entre los peloteros y los dueños por la compensación de la libre agencia recortó 54 juegos a mitad de temporada.
“Yo lideraba la liga en bateo en 1981 cuando nos fuimos de huelga, .342, o algo así”, dijo Evans. “Estaba cerca del liderato de jonrones, carreras empujadas, cuando nos declaramos en huelga. Nunca había tenido un año como ese...Estuvimos sin jugar por cincuenta y tantos días, y cuando regresé, no pude retomar el paso”.
Evans perdería casi 50 puntos de su promedio de bateo después que terminó la huelga, aún asi terminaría tercero en la votación del jugador más valioso. Cuando se reanudó la temporada en agosto, él se ganó un puesto en el equipo de estrellas de la Liga Americana, aunque Reggie Jackson lo venció en la votación de los aficionados para ocupar un puesto en el equipo abridor.
“Respeto a Reggie Jackson, pero Reggie Jackson con un promedio de .190 y algo, fue el jardinero derecho abridor”, dijo Evans. “Me digo, ‘Algo está mal con este sistema’, y no era una crítica para Reggie. Era una crítica para el sistema”.
Por supuesto que Evans ha enfrentado situaciones más adversas. Craig Calcaterra escribió recientemente para NBC Sports acerca de las vidas que llevan los peloteros y los factores inadvertidos que podrían afectar su desempeño. En 1991, Evans le dijo a The Baltimore Sun que tenía un hijo, Tim, quien nació con neurofibromatósis, también conocida como la enfermedad del hombre elefante. Otro hijo, Justin, también fue diagnosticado con la enfermedad, a muy temprana edad. Una hija, Kirsten, nació sana, aunque Evans le dijo a Sporting News que la enfermedad de sus hijos había afectado la cantidad de atención que ella había recibido.
Evans dijo que es más fácil mirar su carrera en retrospectiva ahora.
“No disfrutaba cuando jugaba porque tenía dos hijos muy enfermos”, dijo Evans. “Mi hijo mayor ha tenido 43 cirugías. Tiene 43 años, le va bien, batalló contra el cáncer en los últimos años. Tengo otras cosas en mi vida, el Salón de la Fama es grandioso. Justifica todo el trabajo duro y que lo que hiciste significa algo…Pero eso no me hace una mejor persona o un gran pelotero o lo que sea”.
Evans dijo que su fe cristiana le dio fuerzas a él y a su esposa para sobrellevar la enfermedad de sus hijos. Eso también pone en perspectiva al Salón de la Fama.
“¿Me afecta eso? dijo Evans. “Si ocurre, si. Si no, estoy conforme. Voy a ser un inquilino en el Salón de la Fama del cielo. No me importa el de aquí. Me refiero, si, pero no”.
Traducción: Alfonso L. Tusa C.
miércoles, 12 de julio de 2017
Daniel Flores: magallanero, maduro y agradecido. El Emergente. Ignacio Serrano
martes, 4 de julio de 2017
El adolescente, considerado el mejor prospecto venezolano en el proceso de firmas de Julio 2 este año, hizo un llamado a los peloteros más jóvenes que él, para que sigan sus pasos con responsabilidad. Su ídolo es Salvador Pérez y sueña con llegar al Salón de la Fama
Por Ignacio Serrano
ElEmergente.com
Daniel Flores es apenas un adolescente con 16 años de edad, a quien la vida le cambió el domingo. Ese día, lo que estaba preparado y atado desde hacía semanas, incluso meses, se concretó con su firma para los Medias Rojas de Boston, un acuerdo que ratificó su lugar como el prospecto más sobresaliente de Venezuela en la generación de 2017.
Flores, oriundo de Margarita, fue presentado este lunes en Caracas, en una rueda de prensa que contó con la participación de su academia, Puro Beisbol, donde se formó en los pasados dos años y fracción, y de los propios bostonianos, representados por Manny Padrón, coordinador de scouts de esa organización en nuestro país.
“Nos la puso muy fácil”, declaró Padrón, al ser interrogado por los reporteros presentes. “Es muy fácil de ver su madurez. Es muy poco común encontrar eso en un joven de 16 años de edad. Es súper profesional, educado, con tremendos valores. Todo el crédito para su familia y su academia”.
El joven receptor, a quien Baseball America y MLB.com vaticinan un largo recorrido, por combinar un gran potencial ofensivo con habilidades especiales a la defensiva, reveló su personalidad con el saludo que dedicó a los presentes.
“Tengo que agradecer a toda mi familia y a las personas que me ayudaron a cumplir este sueño”, dijo Flores. “A mi madre, que es la mujer más bella de este mundo. A mi hermosa hermana. Gracias a la academia, a todos mis tutores…” y así, durante uno o dos minutos.
Particularmente maduras fueron sus palabras a los peloteros menores que él, que pueden ver en su promocionada firma con los patirrojos un ejemplo a seguir: “A todos los niños que ahora me están escuchando, cero mentiras, cero picardía, cero violencia. Concentración, disciplina, enfoque, y lo más importante, esto sigue siendo un juego. Diviértanse, que eso es lo más importante de todo”.
Flores recibió el mayor bono de este proceso de firmas en Venezuela, el tercero más importante de todos los tiempos, con 3,1 millones de dólares.
Su talento justifica la apuesta de los Medias Rojas. Sus propios sueños son superlativos.
“Como receptor, quiero emular a Salvador Pérez, que es mi ídolo desde pequeño”, comentó, delante de periodistas como César Sequera, Andriw Sánchez y Rómulo Venegas. “Bateando a la derecha, espero ser como Miguel Cabrera. Y la zurda, me gusta mucho lo que hace Víctor Martínez”.
Porque Flores, además de tener fuerza y brazo, es ambidiestro. Otra virtud, no muy vista en la posición que ocupa en el diamante.
“Su bate a la zurda es muy maduro, con buen reconocimiento de la zona de strike, lo que es muy importante para un joven”, describió José Salas hijo, agente del prospecto. “A la derecha tiene un poder tremendo. Y detrás del plato es muy inteligente”.
Él, que es magallanero y ya firmó con los Navegantes, quiere “jugar lo más pronto posible” con los turcos y vivir una carrera de “15 o 20 años en las Grandes Ligas”.
“Ojalá pueda tener la consistencia necesaria para estar todo ese tiempo, y ojalá que cuando todo termine pueda llegar al Salón de la Fama”, comentó.
Es el mismo anhelo de Boston, la franquicia que apostó todo por él.
Ignacio Serrano
Cobb, y los Rayos blanquean a Porcello y los Medias Rojas 1-0
Dick Scanlon. Associated Press. 08-07-2017
St. Petersburg, Fla. Los Rayos de Tampa Bay aprovecharon al máximo el ajuste de una decisión arbitral mediante revisión de película de video. Alex Cobb mostró el camino.
Cobb pitcheó pelota de dos imparables hasta el octavo inning y los Rayos vencieron a Rick Porcello y a los Medias Rojas de Boston 1-0 este sábado.
“El pitcher de ellos estuvo impresionante” dijo el manager de Tampa Bay, Kevin Cash, “el nuestro estuvo un poquito mejor”.
Cobb (7-6) retiró 11 en fila durante una parte del juego. Alex Colome logró los cuatro outs finales para su salvado 24.
Los Medias Rojas pusieron hombres en tercera y segunda con un out en el noveno inning. Hanley Ramirez se ponchó tirándole. Luego que el novato Andrew Benintendi fue boleado intencionalmente, Chris Young bateó un elevado para terminar el juego.
“Fue un gran juego”, dijo Mookie Betts, quien bateó uno de los tres imparables de Boston. “No se puede pedir más de un duelo de pitcheo”.
Porcello (4-11) se convirtió en el primer perdedor de 11 juegos a pesar de lanzar una joya. El ganador del premio Cy Young de la temporada pasada permitió seis imparables, ponchó siete y no concedió boletos en su primer juego completo de la temporada.
“Hay muchas cosas que escapan a tu control en las victorias y las derrotas”, dijo Porcello, quien tenía marca de 11-2 hace un año en el receso del juego de las estrellas. “Solo he salido ahí para darle al equipo la oportunidad de ganar cada quinto día, y vamos a ganar muchos más juegos de los que perderemos”.
Jesús Sucre empujó la única carrera del juego con elevado de sacrificio en el segundo inning después de sencillos de Steven Souza Jr., y Brad Miller.
El inning fue prolongado por la revisión del video de un dobleplay. Una revisión de 94 segundos determinó que Adeiny Hechavarría había superado el tiro de Dustin Pedroia a primera base. Entonces Porcello golpeó a Shane Peterson antes que Sucre elevara al centro para remolcar a Souza.
“Una jugada cerrada en primera que ellos reversaron para prolongar el inning, y el elevado de sacrificio, de otra manera era el fin del inning”, dijo el manager de los Medias Rojas, John Farrell. “Desafortunadamente la manera como las cosas se han desarrollado para Rick, lo ha desfavorecido porque no hemos sido capaces de responder a la ofensiva”.
Xander Bogaerts con un machucón al cuadro en el primer inning, un sencillo de Betts al centro en el tercero y un doble de Mitch Moreland en el noveno fueron los únicos imparables de Boston.
Mallex Smith tuvo dos de los seis imparables de Tampa Bay, incluyendo un triple con dos outs en el séptimo inning.
El triunfo puso a los Rayos a 4.5 juegos de los líderes de la división este, los Medias Rojas, con un juego por jugar antes del receso del juego de estrellas.
“Cuando te vas del montículo te sientes agradado de haber sido parte del juego”, dijo Cobb. “La magnitud de enfrentar a los Medias Rojas y llegar al receso del juego de estrellas luchando por el comodín, todos esos factores están en juego cuando piensas en el juego de esta noche”.
Traducción: Alfonso L. Tusa C.
lunes, 10 de julio de 2017
Clasificación de Poder por Posiciones a Mitad de Temporada de MLB: Los mejores Segundas Bases según Bleacher’s Report.
Joel Reuter. 05 de julio de 2017.
Lo que una vez fuese un punto débil alrededor de las ligas, la segunda base se ha convertido rápidamente en una de las posiciones más profundas de las mayores, con una buena mezcla de estrellas establecidas y peloteros jóvenes en ascenso.
Hay talento de superestrellas legítimas en tipos como Robinson Canó, José Altuve y Dustin Pedroia, una estrella emergente en Jonathan Schoop y hasta unos pocos veteranos que superan las expectativas como Scooter Gennett y Eric Sogard.
Y eso es solo la punta del iceberg.
En lo sucesivo presentaremos la clasificación de los 30 mejores segundas bases aquí, en el punto medio de la temporada de 2017.
Algunas cosas a considerar antes de empezar:
Promedios de Liga: Como referencia, el promedio de la línea de triple barra sesgada de las ligas para un segunda base esta temporada es .268/.331/.421,
Elegibilidad: Para ser considerado elegible, un pelotero debe haber participado al menos en 51 por ciento de sus juegos en segunda base esta temporada.
Clasificación pre-temporada: Se incluye una mirada a donde cada pelotero estaba ubicado en nuestras clasificaciones de pre-temporada.
La otra cosa importante a notar es que la meta era identificar los mejores 30 segundas bases de la temporada 2017 y nada más.
¿De aquí en adelante, es alguien como Jason Kipnis una mejor opción para producir que Scooter Gennett?
Probablemente, pero no se trata de eso, se trata de clasificar a los peloteros en base a su actuación hasta el momento esta temporada.
30. Jonathan Villar, Cerveceros de Milwaukee (Clasificación de Pre-temporada: 10)
1 de 30
2017 Ofensiva: .211 BA , .633 OPS, 52 H, 18 XBH (8 HR), 29 RBI, 31 R
2017 Defensiva: 3 DRS, -13.0 UZR/150, -2.1 DEF
WAR: 0.1
Resúmen del pelotero
Se esperaba que Jonathan Villar fuese poco más que un respaldo para el prospecto emergente Orlando Arcia la temporada pasada, luego que Milwaukee lo adquiriese en un cambio con los Astros de Houston.
En lugar de eso, el pelotero de 26 años de edad bateó para .285 mientras alcanzaba hasta 60 extra-bases y el liderato de la Liga Nacional con 62 bases robadas camino a un 3.9 de WAR, además de algunos indicadores serios de regresión, incluyendo un BABIP de .373.
Esa regresión de hecho ha pegado fuerte y él también ha tenido dificultades defensivas al hacer la transición desde el campocorto a la segunda base. Sigue siendo una amenaza en las bases, aunque, está igualado en el décimo lugar de las mayores con 15 robos.
29. Jason Kipnis, Indios de Cleveland (Clasificación de Pre-temporada: 7)
2 de 30
2017 Ofensiva: .229 BA, .676 OPS, 55 H, 23 XBH (8 HR), 26 RBI, 28 R
2017 Defensiva: -1 DRS, -8.5 UZR/150, -1.7 DEF
WAR: 0.2
Resúmen del pelotero
Jason Kipnis descargó un tope personal de 23 jonrones la temporada pasada mientras conseguía un OPS de .811 que también incluía 41 dobles, 82 carreras empujadas, 91 anotadas para ayudar a los Indios de Cleveland a llegar hasta la Serie Mundial.
La línea de estadísticas de esta temporada ha sido mucho menos impresionante.
El dos veces asistente al Juego de Estrellas, empezó la temporada en la lista de incapacitados con una lesión en el hombro, por lo cual perdió una buena parte del entrenamiento primaveral y los primeros 15 juegos de la temporada regular y todavía no ha encontrado su mejor forma.
Un regreso a su rendimiento habitual en la segunda mitad aportaría un gran impulso a los Indios en su intento por lograr otro título de la división central de la Liga Americana.
28. Ben Zobrist, Cachorros de Chicago (Clasificación de Pre-temporada: 8)
3 de 30
2017 Ofensiva: .218 BA, .700 OPS, 42 H, 16 XBH (7 HR), 21 RBI, 22 R
2017 Defensiva: 5 DRS, 12.6 UZR/150, 3.1 DEF
WAR: 0.5
Resúmen del pelotero
Ben Zobrist ha estado batallando con un dolor de espalda por buena parte de la temporada y fue activado recientemente desde la lista de incapacitados luego de perder 17 juegos.
Cuando ha jugado al campo, el jugador más valioso de la última Serie Mundial ha asumido el papel de super-utility esta temporada, con una buena parte del tiempo empleada en las esquinas de los jardines para darle tiempo de juego a Javier Baez en segunda base.
El jugador de 36 años de edad todavía es uno de los más difíciles de ponchar en el juego y su enfoque profesional en el plato puede ser contagioso para los jóvenes bateadores de los Cachorros. Si él puede dejar atrás los dolores de espalda, podría subir rápidamente en esta clasificación.
27. Daniel Robertson, Rayos de Tampa Bay (Clasificación de Pre-temporada: NR)
4 de 30
2017 Ofensiva: .224 BA, .679 OPS, 38 H, 12 XBH (5 HR), 16 RBI, 19 R
2017 Defensiva: 1 DRS, 6.4 UZR/150, 1.3 DEF
WAR: 0.8
Resúmen del pelotero
Daniel Robertson fue clasificado como el prospecto No. 1 del sistema de los Atléticos de Oakland y el No. 66 del beisbol de cara a la temporada de 2015, por Baseball America.
Oakland lo envió a Tampa Bay como parte del cambio de Ben Zobrist ese mismo receso entre temporadas, y mientras su categoría de prospecto se ha desteñido desde entonces, el pelotero de 23 años de edad se ha labrado un lugar como reemplazo de Logan Forsythe esta temporada.
Un bateador de .278/.368/.412 en partes de cinco temporadas de ligas menores, Robertson es capaz de más de lo que ha mostrado ofensivamente hasta el momento. Sin embargo, está aportando un buen desempeño defensivo, y tiene el perfil de bajo costo que los Rayos buscan consistentemente.
26. Chase Utley, Dodgers de Los Angeles (Clasificación de Pre-temporada: 29)
5 de 30
2017 Ofensiva: .224 BA, .717 OPS, 41 H, 18 XBH (5 HR), 22 RBI, 24 R
2017 Defensiva: -1 DRS, 0.6 UZR/150, 0.7 DEF
WAR: 0.3
Resúmen del pelotero
Chase Utley no ha encontrado exactamente la fuente de la juventud desde que se unió a los Dodgers de Los Angeles, pero al menos parece bañarse en un pozo adyacente.
El pelotero de 38 años de edad firmó para jugar otra temporada luego de jugar a un nivel superior a lo esperado la temporada pasada cuando tuvo un OPS de .716 con 26 dobles y 14 jonrones en 565 apariciones al plato.
Se esperaba que él fuese el respaldo para la adquisición del receso entre temporadas, Logan Forsythe, en lugar de eso ha visto la mayor parte del tiempo de juego debido a que Forsythe de nuevo tiene dificultades con una lesión. Ya no es el pelotero de impacto que fue en su apogeo, pero todavía es una opción para jugar a diario y una oferta relativa por 2 millones de dólares.
25. Devon Travis, Azulejos de Toronto (Clasificación de Pre-temporada: 12)
6 de 30
2017 Ofensiva: .259 BA, .729 OPS, 48 H, 23 XBH (5 HR), 24 RBI, 22 R
2017 Defensiva: 3 DRS, 3.3 UZR/150, 2.6 DEF
WAR: 0.7
Resúmen del pelotero
Devon Travis no regresará al terreno de juego hasta septiembre luego de someterse a una cirugía para reparar un cartílago dañado en su rodilla derecha.
De aún solo 26 años de edad, ha desarrollado la reputación de alguien quien no puede mantenerse sano el tiempo suficiente para desplegar su vasto potencial.
Sus promedios de 162 juegos en su estadía en las mayores: .292/.331/.462, 49 dobles, 18 jonrones, 83 carreras empujadas, 114 anotadas.
Esos son números de los cinco mejores de la posición si él puede encontrar la forma de mantenerse sano. Por el momento, ocupa un lugar cercano al fondo de la clasificación por lo que fue capaz de hacer en 50 juegos de esta temporada, antes de la lesión.
24. Kolten Wong, Cardenales de St. Louis (Clasificación de Pre-temporada: 20)
7 de30
2017 Offensiva: .301 BA, .838 OPS, 46 H, 18 XBH (1 HR), 19 RBI, 23 R
2017 Defensiva: -2 DRS, -7.1 UZR/150, -1.9 DEF
WAR: 0.7
Resúmen del pelotero
Esta pudiera ser una temporada de todo o nada para Kolten Wong.
El camarero de 26 años de edad ha dado señales de ser un pelotero dinámico de dos vías con los Cardenales de San Luis en las dos temporadas pasadas, pero también ha sufrido lesiones y tenido dificultades para estabilizar su ofensiva.
Los Cardenales le dieron una extensión de contrato de cinco años por 25.5 millones de dólares antes de la temporada pasada y un voto de confianza al inicio de este año, pero el juego impresionante de Paul DeJong ha puesto a pensar al equipo.
Wong se está recuperando de un estiramiento de tríceps y debería regresar a jugar poco después del Juego de Estrellas. Estaba bateando bien antes de lastimarse al ostentar el mejor promedio del equipo con .301, así que buscará retomar las cosas justo donde las dejó.
23. Brandon Phillips, Bravos de Atlanta (Clasificación de Pre-temporada: 26)
8 de 30
2017 Ofensiva: .291 BA, .768 OPS, 82 H, 26 XBH (7 HR), 29 RBI, 41 R
2017 Defensiva: -4 DRS, 3.0 UZR/150, 2.0 DEF
WAR: 0.9
Resúmen del pelotero
Los Bravos de Atlanta tomaron a Brandon Phillips con un descuento esta temporada para usarlo como respaldo del valorado prospecto Ozzie Albies.
En el año final de su contrato, los Rojos de Cincinnati están pagando todo menos un millón de dólares del salario de 14 millones del veterano y todo lo que costó en términos de talento fue un par de prospectos de bajo nivel.
Debe esperarse muchas conversaciones de cambio alrededor de Phillips al acercarse la fecha límite de cambios, con Albies tocando la puerta y los dos equipos lejos de aspirar a cosas grandes esta temporada. El jugador de 36 años de edad aún es capaz de producir carreras amén de ser un buen defensor.
22. Cesar Hernandez, Filis de Philadelphia (Clasificación de Pre-temporada: 23)
9 de 30
2017 Ofensiva: .277 BA, .735 OPS, 66 H, 17 XBH (5 HR), 14 RBI, 40 R
2017 Defensiva: 2 DRS, 9.0 UZR/150, 4.6 DEF
WAR: 1.0
Resúmen del pelotero
Un antiguo prospecto de primera línea quien se desarrolló algo más tarde de lo esperado, Cesar Hernández tuvo una temporada reveladora el año pasado, cuando bateó .294/.371/.393 con 31 extrabases and 17 bases robadas para un WAR de 3.3.
El pelotero de 27 años de edad podría terminar siendo una pieza de cambio para los Filis de Filadelfia con el prospecto de segunda base, Scott Kingery castigando el pitcheo de las ligas menores a ritmo de un OPS de .987 con 22 jonrones y 21 bases robadas.
Él nunca será un bateador de poder, pero aporta una buena mezcla de promedio y capacidad para embasarse mientras juega la segunda base por encima del promedio. Eso acoplado con que tiene contrato con el equipo hasta 2020 debería asegurar un desenlace decente para los Filis si y cuando él sea finalmente mudado.
21. Joe Panik, Gigantes de San Francisco (Clasificación de Pre-temporada: 18)
10 de 30
2017 Ofensiva: .278 BA, .743 OPS, 78 H, 23 XBH (5 HR), 26 RBI, 36 R
2017 Defensiva: -2 DRS, 2.8 UZR/150, 2.6 DEF
WAR: 1.2
Resúmen del pelotero
Integrante del equipo de estrellas en 2015, Joe Panik cayó a una línea de bateo de .239/.315/.379 la temporada pasada, mientras su WAR se derrumbaba desde 3.4 hasta 1.1 en el proceso.
No ha regresado completamente a su mejor forma este año, en lugar de eso ha permanecido en medio de sus números de algun momento de 2015 y donde se hundió el año pasado.
Con 26 años de edad es uno de los peloteros más difíciles de ponchar en la liga con solo 157 ponches en 1562 apariciones al plato, y cuando su swing está bien, se perfila como un segundo bate natural con buenas destrezas con corredores en base y poder en los callejones.
20. Eric Sogard, Cerveceros de Milwaukee (Clasificación de Pre-temporada: NR)
11 de 30
2017 Ofensiva: .326 BA, .916 OPS, 44 H, 15 XBH (3 HR), 14 RBI, 24 R
2017 Defensiva: 3 DRS, 16.0 UZR/150, 1.2 DEF
WAR: 1.7
Resúmen del pelotero
Luego de siete temporadas con los Atléticos de Oakland, Eric Sogard perdió la mayor parte de la temporada de 2016 despues de someterse a una cirugía antes de probar la libre agencia el invierno pasado.
Los Cerveceros de Milwaukee le dieron un contrato de ligas menores y empezó la temporada en AAA, donde bateó para .330/.421/.516 con 11 extrabases en 107 apariciones al plato antes de ser promovido a las grandes ligas.
La regresión sin duda llegará, pero el aún debería ser un veterano de presencia valiosa y una opción sólida como utility para un equipo de los Cerveceros en una buena temporada.
19. Yangervis Solarte, Padres de San Diego (Clasificación de Pre-temporada: 20/3B)
12 de 30
2017 Ofensiva: .268 BA, .775 OPS, 68 H, 20 XBH (10 HR), 40 RBI, 28 R
2017 Defensiva: -3 DRS, -4.3 UZR/150, -0.4 DEF
WAR: 0.8
Resúmen del pelotero
Yangervis Solarte se mudó hasta la segunda base esta temporada luego de jugar principalmente en la esquina caliente desde que se unió a los Padres de San Diego.
El pelotero de 29 años de edad firmo una negociación de dos años por 7.5 millones de dólares en el receso entre temporadas que incluye un opción de 5.5 millones de dólares por 2019 y otra de 8 millones por 2020, con lo cual los Padres de San Diego lo ven como pieza importante del rompecabezas de la reconstrucción.
Luego de batear para un OPS de .808 con 15 jonrones y 71 carreras empujadas el año pasado, está en camino de otra sólida temporada ofensiva siempre que deje atrás la lesión (oblique) que lo ha mantenido en la lista de incapacitados.
18. Brandon Drury, Cascabeles de Arizona (Clasificación de Pre-temporada: 28)
13 de 30
2017 Ofensiva: .286 BA, .797 OPS, 75 H, 30 XBH (8 HR), 39 RBI, 27 R
2017 Defensiva: 0 DRS, 3.0 UZR/150, 2.0 DEF
WAR: 1.0
Resúmen del pelotero
A pesar de batear para .282 con 31 dobles y 16 jonrones como novato la temporada pasada, Brandon Drury tuvo un WAR de 0.0 al tener dificultades defensivas por momentos mientras rebotaba por el diamante como pelotero utility.
Los Cascabeles de Arizona cambiaron a Jean Segura en el receso entre temporadas y así dejaron libre el camino para el trabajo de segunda base regular, y él se ha establecido agradablemente con desempeño defensivo positivo y similares números ofensivos impresionantes.
El pelotero de 24 años de edad fue una máquina de batear dobles en las menores y esa habilidad se ha trasladado a su próximo nivel. Puede ser que nunca gane un guante de oro o se acerque a batear 30 jonrones, pero Drury es un contribuyente estable en un equipo insurgente como los Cascabeles.
17. Javier Baez, Cachorros de Chicago Clasificación de Pre-temporada: 14)
14 de 30
2017 Ofensiva: .258 BA, .756 OPS, 59 H, 25 XBH (10 HR), 33 RBI, 30 R
2017 Defensiva: 5 DRS, 2.9 UZR/150, 0.2 DEF
WAR: 1.1
Resúmen del pelotero
Una de las estrellas emergente de la postemporada del año pasado, Javier Baez aun busca la consistencia necesaria para convertirse en un legítimo pelotero clave para los Cachorros de Chicago.
Es una maravilla defensiva en cualquier lugar del cuadro interior donde lo ubiquen, pero los Cachorros le han convertido en su segunda base regular esta temporada luego de usarlo como utility el año pasado.
Al disponer de un bate rápido más poder natural, tiene las herramientas para despachar 30 jonrones si puede hacer suficiente contacto, pero sigue siendo susceptible a los ponches y en general aun es un pelotero de rachas ofensivas.
No hemos visto lo mejor de Baez aun, pero la versión actual ya es agradable de observar.
16. Dee Gordon, Marlins de Miami (Clasificación de Pre-temporada: 13)
15 de 30
2017 Ofensiva: .284 BA, .677 OPS, 90 H, 16 XBH (0 HR), 18 RBI, 44 R
2017 Defensiva: 3 DRS, 4.9 UZR/150, 2.8 DEF
WAR: 1.2
Resúmen del pelotero
Luego de firmar una extensión de cinco años por 50 millones de dólares, Dee Gordon solo jugó 79 juegos la temporada pasada mientras cumplía con una suspensión de 80 juegos por consumir drogas de alto rendimiento.
El velocista está de vuelta en el tope de la alineación de los Marlins de Miami esta temporada y de nuevo es una presencia inquietante en las bases con 29 robos en 34 intentos.
El camarero de 29 años de edad nunca será una amenaza de poder, solo ha bateado 9 jonrones en 2661 apariciones vitalicias al plato, pero sabe como utilizar su velocidad en todos los aspectos del juego y también se ha convertido en un buen segunda base defensivo luego de empezar su carrera como campocorto.
15. Brian Dozier, Mellizos de Minnesota (Clasificación de Pre-temporada: 5)
16 de 30
2017 Ofensiva: .248 BA, .760 OPS, 77 H, 30 XBH (13 HR), 38 RBI, 37 R
2017 Defensiva: 0 DRS, -2.1 UZR/150, -0.6 DEF
WAR: 1.1
Resúmen del pelotero
Brian Dozier descargó 28 jonrones después del receso del Juego de Estrellas de la temporada pasada, camino a convertirse en el cuarto segunda base en la historia de la Liga Nacional en alcanzar la marca de los 40 cuadrangulares en una temporada.
Regresó a los Mellizos de Minnesota luego de un receso entre temporadas lleno de rumores, y como se esperaba, bajó un poco el ritmo de toletero que vimos en la segunda mitad de 2016.
Sin embargo, Dozier sigue siendo una de las amenazas de poder élite de la posición, y su salario de 6 millones de dólares de este año y de 9 millones la próxima temporada le da mucho valor de cambio si los Mellizos deciden salir de él. Por el momento, es una presencia valiosa como productor clave de carreras en la alineación de un contendor sorpresivo.
14. Neil Walker, Mets de New York (Clasificación de Pre-temporada: 16)
17 de 30
2017 Ofensiva: .270 BA, .820 OPS, 60 H, 24 XBH (9 HR), 33 RBI, 35 R
2017 Defensiva: -2 DRS, 3.5 UZR/150, 1.0 DEF
WAR: 1.2
Resúmen del pelotero
Neil Walker aceptó una oferta calificada de los Mets de Nueva York durante el receso entre temporadas, esperando mejorar su inventario como agente libre luego de someterse a un cirugía de espalda en septiembre.
Luego de batear .282/.347/.476 hace un año, ha logrado una casi idéntica línea de bateo con .270/.352/.468 en lo que va de año.
El pelotero de 31 años de edad ha sido un consistente bateador de 20 jonrones y productor de mitad de la alineación a lo largo de su carrera. Se le hará difícil conseguir un salario similar a los 17.2 millones de dólares que devenga este año en una negociación multianual en la libre agencia y de nuevo está en dificultades con una lesión en la pantorrilla, pero aún le queda mucho en el tanque.
13. Yolmer Sánchez, Medias Blancas de Chicago (Clasificación de Pre-temporada: NR)
18 de 30
2017 Ofensiva: .272 BA, .741 OPS, 63 H, 19 XBH (4 HR), 23 RBI, 32 R
2017 Defensiva: 6 DRS, 11.4 UZR/150, 3.1 DEF
WAR: 1.6
Resúmen del pelotero
Yolmer Sanchez lucía como poco menos que un respaldo para el prospecto de primera línea Yoan Moncada cuando empezó la temporada, pero ya estamos en julio y él continúa siendo clave para los Medias Blancas de Chicago.
Conocido anteriormente como Carlos Sánchez antes de cambiarse a Yolmer este receso entre temporadas, el pelotero de 25 años de edad ha sido una agradable sorpresa para los inquilinos del South Side, quienes aún están en las etapas iniciales de una reestructuración y por tanto en posición de darle amplias oportunidades a los peloteros jóvenes.
Sánchez siempre ha sido un buen defensor, pero solo bateó para .224/.261/.330 en 643 apariciones al plato en sus primeras tres temporadas en la liga, así que la superación en producción ofensiva ha sido un desarrollo bienvenido.
12. Whit Merrifield, Reales de Kansas City (Clasificación de Pre-temporada: NR)
19 de 30
2017 Ofensiva: .290 BA, .783 OPS, 71 H, 25 XBH (6 HR), 31 RBI, 29 R
2017 Defensiva: 3 DRS, 2.5 UZR/150, 1.3 DEF
WAR: 1.8
Resúmen del pelotero
Un novato la temporada pasada a los 27 años de edad, Whit Merrifield bateó .283 con 27 extrabases y 44 carreras anotadas en 332 apariciones al plato como una agradable sorpresa para los Reales de Kansas City.
Se esperaba que Raul A. Mondesí fuese el segunda base regular esta temporada con Merrifield en el papel de utility, pero el antíguo prospecto de primera línea tuvo dificultades hasta el punto de ser degradado y en consecuencia, Merrifield se ha colado hasta el puesto de regular.
Su rendimiento ofensivo tiene algunos puntos pendientes, el más notable es la tasa de 4.9 por ciento de boletos que lo ubica en el lugar 149 entre 168 bateadores calificados, pero hace contacto consistentemente y también ha sido estable a la defensiva.
11. Jed Lowrie, Atléticos de Oakland (Clasificación de Pre-temporada: NR)
20 de 30
2017 Ofensiva: .278 BA, .817 OPS, 83 H, 37 XBH (9 HR), 28 RBI, 50 R
2017 Defensiva: 1 DRS, -2.4 UZR/150, -0.5 DEF
WAR: 2.3
Resúmen del pelotero
Jed Lowrie ni siquiera apareció en nuestra clasificación de pre-temporada luego de jugar un combinado de 156 encuentros en las dos temporadas pasadas y batear .246/.313/.354 con seis jonrones y 28 carreras empujadas.
El pelotero de 33 años de edad finalmente está sano esta temporada, y aunque ha sido un punto brillante para los Atléticos de Oakland, estos buscarán salir del veterano para la fecha límite de cambios, en la continuación del movimiento actual con peloteros jóvenes.
Sus sólidos números ofensivos y versatilidad defensiva deberían convertirlo en un objetivo atractivo para muchos contendores, y la opción de 6 millones de dólares en la próxima temporada lo convierte en más que una opción si se gana el puesto.
10. Dustin Pedroia, Medias Rojas de Boston (Clasificación de Pre-temporada: 6)
21 de 30
2017 Ofensiva: .303 BA, .771 OPS, 76 H, 16 XBH (2 HR), 36 RBI, 29 R
2017 Defensiva: 2 DRS, 11.8 UZR/150, 5.2 DEF
WAR: 1.1
Resúmen del pelotero
Dustin Pedroia todavía está fuerte a sus 33 años de edad y tiene una de las mejores campañas ofensivas de su aquilatada carrera.
Bateó .318 con un OPS de .825, 36 dobles, 15 jonrones y 74 carreras empujadas la temporada pasada mientras desarrollaba su defensiva estelar, y de nuevo ha estado en el medio de los acontecimientos este año.
Pedroia todavía tiene pendientes cuatro años y 56 millones de dólares de su contrato después de esta temporada, pero no muestra señales de bajar el ritmo y debería continuar siendo el catalizador ofensivo y el líder del club house de los Medias rojas de Boston.
9. Scooter Gennett, Rojos de Cincinnati (Clasificación de Pre-temporada: NR)
22 de 30
2017 Ofensiva: .311 BA, .948 OPS, 60 H, 26 XBH (13 HR), 43 RBI, 36 R
2017 Defensiva: -3 DRS, 23.3 UZR/150, 1.5 DEF
WAR: 1.9
Resúmen del pelotero
Scooter Gennett desplegó una de las mejores actuaciones individuales en la historia de MLB, el 6 de junio cuando bateó de 5-5 con cuatro jonrones y 10 carreras empujadas.
Mientras eso ciertamente potenció su línea de estadísticas, su juego ofensivo ha sido una agradable sorpresa para los Rojos de Cincinnati toda la temporada, luego que lo reclamaron de las lista de waivers en marzo desde sus rivales divisionales, Cerveceros de Milwaukee.
Las dificultades iniciales de José Peraza, de quien se esperaba que fuese el segunda base regular, ha abierto la puerta para Gennett vea más tiempo de juego, y mientras siga bateando, será muy difícil devolverlo a su papel de reservista.
8. DJ LeMahieu, Rockies de Colorado (Clasificación de Pre-temporada: 9)
23 de 30
2017 Ofensiva: .309 BA, .750 OPS, 101 H, 18 XBH (3 HR), 38 RBI, 44 R
2017 Defensiva: 7 DRS, 7.0 UZR/150, 5.6 DEF
WAR: 1.4
2017 All-Star
Resúmen del pelotero
DJ LeMahieu probablemente no pertenezca al equipo Todos Estrellas de la Liga Nacional como Kris Bryant, Justin Turner y varios otros, pero está teniendo una temporada sólida.
El camarero de 28 años de edad ganó el título de bateo de la Liga Nacional el año pasado con .348 de promedio, y está bateando sobre .300 de nuevo como componente clave del ataque ofensivo de los Rockies de Colorado, aunque con poder limitado.
También es uno de los mejores camareros defensivos del juego, y un segundo premio guante de oro en su carrera pudiese estar en camino si mantiene sus estadísticas defensivas actuales.
7. Ian Kinsler, Tigres de Detroit (Clasificación de Pre-temporada: 3)
24 de 30
2017 Offensiva: .243 BA, .734 OPS, 62 H, 22 XBH (9 HR), 21 RBI, 48 R
2017 Defensiva: 8 DRS, 19.3 UZR/150, 6.2 DEF
WAR: 2.0
Resúmen del pelotero
Ian Kinsler tuvo 6.1 de WAR la temporada pasada y su WAR vitalicio de 55.0 es décimoséptimo entre los segundas bases.
Ya no es la amenaza de 30 robos por temporada que fue en su apogeo, pero aún aporta una combinación de poder y velocidad que pocos peloteros de la liga en cualquier posición posee.
El pelotero de 35 años de edad fue finalmente recompensado con su primer guante de oro la temporada pasada, un honor largamente pendiente para uno de los mejores defensores de la intermedia en la liga. Será interesante ver cuan agresivos serán los Tigres de Detroit para vender en la fecha límite, porque Kinsler es ciertamente un candidato a ser negociado si deciden desmantelar..
6. Starlin Castro, Yanquis de New York (Clasificación de Pre-temporada: 25)
25 de 30
2017 Ofensiva: .313 BA, .835 OPS, 92 H, 26 XBH (12 HR), 45 RBI, 52 R
2017 Defensiva: -5 DRS, -8.9 UZR/150, -2.0 DEF
WAR: 1.6
2017 All-Star
Resúmen del pelotero
Starlin Castro fue integrante del equipo de estrellas tres veces con los Cachorros de Chicago y ahora se ha ganado su primer viaje al Clásico de Verano como pelotero de la Liga Americana en su segunda temporada con los Yanquis de Nueva York.
El pelotero de 27 años de edad largó un tope de 21 jonrones la temporada pasada, pero lo hizo mientras bateaba para una mediocre línea de bateo .270/.300/.433, y terminó la temporada con 1.3 de WAR.
Ya ha aportado más valor en 73 juegos esta temporada, y mientras su defensa en segunda base permanece por debajo del promedio, sigue destacando en el plato en lo que se perfila como el mejor año de su carrera.
5. Josh Harrison, Piratas de Pittsburgh (Clasificación de Pre-temporada: 24)
26 de 30
2017 Ofensiva: .284 BA, .805 OPS, 85 H, 27 XBH (9 HR), 27 RBI, 35 R
2017 Defensiva: 4 DRS, 2.9 UZR/150, 1.3 DEF
WAR: 2.5
2017 All-Star
Resúmen del pelotero
Josh Harrison ha sido uno de los pocos puntos brillantes de un equipo de los Piratas de Pittsburgh que pudiera estar en camino de un período de reconstrucción luego de la precipitosa caída de la temporada pasada y el lento inicio de este año.
Luego de asumir el papel de utility al inicio de su carrera, se ha estabilizado como el segunda base regular desde que Neil Walker fue cambiado hacia los Mets de Nueva York antes de la temporada pasada.
El pelotero de 29 años de edad debería superar fácilmente su tope personal previo de 13 jonrones y una temporada 20/20 no está fuera de alcance para el pequeño fajador.
4. Jonathan Schoop, Orioles de Baltimore (Clasificación de Pre-temporada: 17)
27 de 30
2017 Ofensiva: .294 BA, .886 OPS, 86 H, 39 XBH (16 HR), 51 RBI, 45 R
2017 Defensiva: -8 DRS, -7.8 UZR/150, -2.7 DEF
WAR: 1.8
2017 All-Star
Resúmen del pelotero
Jonathan Schoop siempre ha tenido tanto poder como cualquier segunda base, pero el resto de su juego ofensivo se ha quedado atrás.
El pelotero de 25 años de edad despachó 38 dobles y 25 jonrones la temporada pasada, pero solo bateó .267 con .298 de promedio con hombres en base en el proceso de agenciar un WAR de 2.1.
Siempre ha sido un pelotero diferente esta temporada.
Una modesta mejoría en su tasa de boletos (desde 3.2 hasta 5.8 por ciento) y un significativo incremento en el contacto (desde 26.6 hasta 34.1 por ciento) ha resultado en un aumento de su OPS por más de 130 puntos. Estará en el juego de estrellas por primera vez este martes.
3. Robinson Canó, Marineros de Seattle (Clasificación de Pre-temporada: 2)
28 de 30
2017 Ofensiva: .280 BA, .835 OPS, 82 H, 30 XBH (17 HR), 60 RBI, 42 R
2017 Defensiva: 0 DRS, -1.1 UZR/150, 1.9 DEF
WAR: 2.1
Resúmen del pelotero
¿Quien recuerda la gran disminución de poder de Robinson Canó en 2014?
Luego de promediar 28 jonrones en sus cinco años finales con los Yanquis de Nueva York, Canó firmó una negociación de 10 años por 240 millones de dólares con los Marineros de Seattle y solo bateó 14 vuelacercas en su primera temporada con ese equipo.
Eso fue seguido por 21 jonrones en 2015 antes de explotar con un tope personal de 39 la temporada pasada, y el camarero de 34 años de edad está probando que eso no fue un espejismo al liderar a los segundas bases en jonrones (17) y carreras empujadas (60) este año.
Con 295 jonrones y 1.146 carreras empujadas en su carrera, Canó se perfila como uno de los peloteros más productivos que se haya desempeñado en la posición.
2. Daniel Murphy, Nacionales de Washington (Clasificación de Pre-temporada: 4)
29 de 30
2017 Ofensiva: .333 BA, .957 OPS, 101 H, 41 XBH (14 HR), 55 RBI, 54 R
2017 Defensiva: -12 DRS, -11.1 UZR/150, -3.2 DEF
WAR: 1.5
2017 All-Star
Resúmen del pelotero
Luego de participar en la carrera por el jugador más valioso de la Liga Nacional la temporada pasada, Daniel Murphy ha sido una vez más un bastión en el medio de la alineación de los Nacionales de Washington.
Es fácil olvidar ahora que él fue esencialmente la tercera opción del equipo cuando se unió a ellos como agente libre, ellos habían fallado en conseguir a Ben Zobrist y luego consideraron un cambio potencial por Brandon Phillips a través del otoño.
Murphy siempre ha sido uno de los bateadores más puros del juego, pero el aumento de su producción de poder desde que llegó a los Nacionales lo ha convertido en un verdadero pelotero de la élite ofensiva.
Su defensa es otra una historia completamente diferente…
1. Jose Altuve, Astros de Houston (Clasificación de Pre-temporada: 1)
30 de 30
2017 Ofensiva: .326 BA, .917 OPS, 101 H, 36 XBH (11 HR), 40 RBI, 53 R
2017 Defensiva: 3 DRS, -2.1 UZR/150, -0.4 DEF
WAR: 4.0
2017 All-Star
Resúmen del pelotero
Decidir quien se queda con el primer lugar es una tarea dificil en varias posiciones.
La segunda base no es una de ellas.
José Altuve ha mostrado que el surgimiento de poder del año pasado (24 jonrones) era en serio y es muy raro que un pelotero de un paso significativo en ese sentido sin sacrificar algo en su promedio de bateo y habilidad para hacer contacto.
El pelotero de 27 años de edad es un legítimo candidato a ser el jugador más valioso de la Liga Americana una vez más para los punteros Astros de Houston y tendrá su quinta aparición en el juego de estrellas.
Con el debido respeto por los inquilinos del Salón de la Fama, Jeff Bagwell y Craig Biggio, pero antes que todo sea dicho y hecho, Altuve podría reclamar ser el mejor pelotero de la historia de los Astros de Houston, especialmente si es capaz de alcanzar un título.
Las estadísticas patron y los totales de WAR son cortesía de Baseball Reference hasta el lunes. Las otras estadísticas avanzadas (DRS, UZR/150, BABIP, etc.) son cortesía de FanGraphs.
Traducción: Alfonso L. Tusa C.
miércoles, 5 de julio de 2017
Esquina de las barajitas: Nelson Briles 1976 Topps.
Bruce Markusen
Los trabajadores del Salón de la Fama también son aficionados al beisbol y les gusta compartir sus historias. Aquí está la perspectiva de un aficionado desde Cooperstown.
No puedo decir que fui amigo del antiguo pitcher de grandes ligas Nellie Briles; solo compartí con él una vez. Pero esa ocasión, la cual ocurrió hace 15 años, me generó una profunda admiración por un hombre especial quien también fue un buen lanzador.
Eso fue en 2001, el viernes del fin de semana de la inducción al Salón de la Fama. El buen amigo de Nellie desde sus días con los Piratas de Pittsburgh, Bill Mazeroski, estaba apunto de ingresar al templo de Cooperstown. A última hora, le pregunté a Nellie, de quien apenas me había enterado que asistiría, si estaría dispuesto a conceder una entrevista acerca de Maz en nuestro Bullpen Theater. Fue una idea de último minuto, no fue un evento que arrastrara una gran multitud, pero era en potencia una programación significativa que podría agregar algo a la experiencia del visitante.
Briles no dudó. A pesar de ser un día ocupado, sin mencionar la incomodidad del calor y la humedad, Briles no solo estaba dispuesto a hablar de Mazeroski, sentía el honor de hacerlo. No decepcionó. Briles fue articulado, reflexivo y profundo durante nuestra conversación de media hora. Además de eso, fue gracioso y encantador. Fue como si Nellie no quisiera perder la oportunidad de rendir tributo a su amigo en el fin de semana cuando fue inducido a su nicho del Salón de la Fama. Después supe que Nellie había trabajado duro para abogar por la elección de Mazeroski al Salón de la Fama.
Despues del programa del viernes, pensé que sería agradable entrevistar a Nellie otra vez en Cooperstown. Bien hablado y arreglado, Briles era el tipo de persona que queríamos entrevistar para el archivo de audio y video del Salón de la Fama. Desafortunadamente nunca tuvimos esa oportunidad.
Basado en esa única experiencia con Nellie, he tratado de coleccionar cada una de sus barajitas Topps. Ahora tengo la mayoría de ellas, excepto las tres primeras, emitidas en 1966, 1967 y 1968. Mi favorita de todas es la que salió hace 40 años: La barajita Topps de 1976 que muestra a Briles lanzando con los Rangers de Texas.
La barajita tiene unas notas de interés. Menciona a Briles como “Nelson”, nada de “Nellie”. Todas la barajitas de beisbol de Briles se refieren a él con su nombre formal. Recuerdo que los narradores también lo llamaban Nelson frecuentemente. Pero las personas quienes conocían a Briles, sus compañeros de equipo y amigos, casi siempre lo llamaban Nellie. Para un tipo afable como Briles, el nombre de Nellie parecía ajustarse mejor a él. Así es como yo lo llamé también.
La barajita Topps de Briles de 1976 también cae en una especie de categoría nebulosa. No es en realidad una toma de acción debido a que no proviene de un juego real; se trata de una imagen de Briles lanzando en las adyacencias del terreno, tal vez calentando en el bullpen. A la vez esta da una especie de primer plano de Briles. Se puede ver claramente el rostro de Briles, lo cual es menudo es difícil de hacer mientras el pitcher está en medio de su movimiento.
Si miramos un poco más de cerca, podríamos notar que la gorra y el uniforme de Briles han sido pintados sobre la foto original. (Briles lanzó toda la temporada de 1975 con los Reales de Kansas City, antes de ser cambiado a los Rangers durante el invierno). La mayor parte del tiempo, Topps reservaba los retoques de pintura para las fotos de perfil, retrato u otros tipos de pose. Era muy raro que Topps pintara el uniforme de un pitcher en medio de sus lanzamientos. Considerando todo esto, ese es uno de los mejores esfuerzos de retoque de pintura de Topps en la década de 1970.
La carrera de grandes ligas de Briles se remonta hasta 1965, cuando debutó con los Cardenales de San Luis. Lanzó principalmente como relevista, lo hizo decentemente, con efectividad de 3.50 en 82 innings. En 1966 lanzó con más eficiencia, pero la mala fortuna le ocasionó una marca negativa de triunfos/derrotas. Compartió sus labores como relevista y abridor, solo ganó 4 de 19 decisiones. Aún así, ponchó 100 bateadores en 154 innings y salvó seis juegos.
Entonces vino la consolidación de Briles. En 1967, Briles destacó como relevista y abridor ocasional. Casi reversó completamente su marca, dejó números de 14-5 para liderar la Liga Nacional en porcentaje de victorias. Disminuyó su efectividad hasta 2.43, la mejor entre los relevistas de los Cardenales. El desempeño de Briles le ganó una consideración en la votación para el jugador más valioso, donde terminó en el puesto 15. Briles también se llevó a casa un anillo de Serie Mundial, cuando los Cardenales vencieron a los Medias Rojas de Boston.
¿Cómo lo hizo Briles? Tenía una recta decente, pero su envío principal era la curva. Antes que depender de los envíos de poder, él tuvo éxito al mantener la pelota baja e inducir roletazos. En 1968, el manager Red Schoendienst le entregó a su especialista de la bola de roletazos la responsabilidad de estar a tiempo completo en la rotación de abridores. Briles hizo 33 aperturas, ganó 19 de ellas, y acumuló un tope personal de 243 innings lanzados.
La temporada de 1968 fue tan dominada por los pitchers que las grandes ligas cambiaron sus reglas a partir de la siguiente temporada. Quizás la alteración más dramática fue la disminución de la altura del montículo desde 15 hasta 10 pulgadas. Ese cambio de reglas afectó más a Briles que a la mayoría. Con su estilo sin wind up y su curva por encima del brazo, Briles necesitaba la altura adicional del montículo. Sin eso, careció de fuerza en sus envíos. Su curva sufrió. También la marca de Briles. Su efectividad subió hasta 3.52, aún decente, pero más de una carrera superior a lo que había sido en 1968.
Aún fastidiado por el montículo rebajado, junto a una serie de lesiones, el pitcheo de Briles se vino abajo por completo en 1970. Solo hizo 19 aperturas, perdió su puesto de tanto tiempo en la rotación de abridores de los Cardenales. Al final de la temporada, su efectividad llegó hasta 6.24, totalmente fuera de lugar respecto al resto de su actuación vitalicia.
El cambio del montículo afectó tan mal a Briles que los Cardenales decidieron cambiarlo en el invierno de 1970. Al desear mejorar sus jardines, los Cardenales acordaron enviar a Briles junto al extraordinario bateador emergente Victor Davalillo a los Piratas por el jardinero Matty Alou y el veterano pitcher zurdo, George Brunet. Para los Piratas, Briles fue la clave del cambio.
Con su nuevo equipo, Briles cambió su movimiento de pitcheo. Abandonó el estilo de pitcheo sin wind up que había usado en San Luis, en su lugar intentó utilizar un wind up completo que era más convencional entre los pitchers de ese tiempo.
El cambió funcionó. Aunque Briles a menudo terminaba paralelo al suelo, y a veces caía completamente hacia su lado. Su nuevo movimiento le permitió recuperar la fortaleza en sus envíos. El manager de los Piratas, Danny Murtaugh, también utilizó a Briles con mucha destreza, combinándolo como relevo largo la mayor parte del tiempo y como abridor ocasional, a consecuencia del calendario y las lesiones de los abridores de los bucaneros. A veces Briles fungió como relevo corto. Al emerger como miembro versátil y valioso del cuerpo de lanzadores, Briles ayudó a los Piratas a ganar la división este de la Liga Nacional.
Mientras los abridores Dock Ellis y Steve Blass se llevaron la mayoría de los titulares durante la temporada regular, Briles emergió desde las sombras en la postemporada. Con Ellis incapacitado por dolores en el brazo de lanzar, Murtaugh recurrió a Briles para abrir el quinto juego de la Serie Mundial. No era una tarea fácil, los rivales Orioles de Baltimore contaban con una alineación cargada de toleteros, desde Boog Powell, pasando por los Robinson (Frank y Brooks) hasta el joven Dave Johnson.
Briles quien había sido ignorado completamente en la serie de campeonato, convirtió su única apertura en la serie en una obra maestra. Los Orioles apenas le conectaron dos imparables, Briles lanzó completo sin permitir notaciones, ganó 4-0 y puso a los Piratas arriba en la serie, tres juegos a dos. Su esfuerzo permanece como una de las actuaciones de pitcheo de Serie Mundial más grandes de todos los tiempos, se podría decir que es la segunda mejor de todos los tiempos, solo por detrás del juego perfecto de Don Larsen.
Sin Briles, tal vez los Piratas no habrían logrado vencer a los Orioles. Con él, ganaron su primer campeonato mundial desde 1960, de esa manera Briles ganaba su segundo anillo de Serie Mundial. El aporte de Briles a los Piratas de 1971 es considerado como su legado más resaltante como pitcher.
Apoyado por mucho tiempo por el esfuerzo de ese quinto juego, Briles se convirtió en abridor a tiempo completo de los Piratas en 1972 y 1973. Ganó 28 juegos compartidos en ambas temporadas, y acumuló más de 400 innings lanzados. Briles fue sin discusión el as del cuerpo de lanzadores de los Piratas, y aún solo tenía 29 años de edad.
Briles siguió siendo noticia durante la Serie Mundial de 1973, aunque los Piratas habían quedado fuera de la postemporada. Antes del cuarto juego en Shea Stadium, Briles cantó el himno nacional, por lo cual impresionó a los observadores con la calidad de su voz. Por años, Briles había cantado en clubes nocturnos, pero la escena de la Serie Mundial le dio la primera oportunidad de ser reconocido nacionalmente.
Por supuesto, a los Piratas poco les importaba acerca de la voz de Briles en términos de su valor para el equipo. Les gustaba la calidad de su pitcheo y su personalidad, por lo cual resultó difícil de entender por qué Pittsburgh decidiera cambiarlo ese invierno. En las reuniones invernales, los Piratas enviaron a Briles a los Reales por dos peloteros utility (Ed Kirkpatrick y Kurt Bevacqua) y un prospecto de ligas menores. Los Piratas consideraban a Kirkpatrick la clave del cambio, creían que sería un respaldo valioso para el catcher Manny Sanguillén.
El cambio fue rechazado por los peloteros de los Piratas y los seguidores del equipo. Pero los Reales estaban muy contentos, particularmente su manager Jack McKeon. “De todos los pitchers disponibles, Briles era a quien queríamos”, le dijo McKeon al periodista deportivo Joe Heiling. “Él es un ganador…un profesional…un tipo con clase”.
Los Reales no sabían que Briles se lastimaría su codo de lanzar en 1974, lo cual limitó a 18 juegos su primer verano con los Reales. Tampoco estuvo completamente bien en 1975, su actuación estuvo reducida a 16 juegos.
Al pensar que Briles ya no era el mismo pitcher de su apogeo en Pittsburgh, los Reales lo negociaron a los Rangers por el rápido infielder, Dave Nelson, El brazo de Briles pareció recuperarse en Texas. Como tercer abridor del equipo, hizo 31 aperturas y lanzó 210 innings, aunque había perdido potencia en su recta. Al convertirse en un pitcher que sabía ubicar sus envíos, Briles se las ingenió para bajar su efectividad hasta 3.26.
El resurgimiento no duró. Briles tuvo dificultades en la primera mitad de 1977. Su valor de cambio disminuyó tanto que los Rangers terminaron colocando a Briles en waivers en septiembre. Los Orioles lo reclamaron, les costó solo 25000 $, pero lanzó pobremente en dos juegos antes que terminara la temporada.
Para 1978, era evidente que Briles estaba ido. Hizo 16 apariciones más para los Orioles, pero su brazo estaba esencialmente deteriorado. Primero, los Orioles lo mantuvieron en su nómina de 40 peloteros, pero en enero, decidieron que era tiempo de desprenderse de él. Briles recibió su despido a principios de 1979. Los Mets de Nueva York lo invitaron a su entrenamiento primaveral pero no pudo ganarse un puesto en el roster inaugural. A los 34 años de edad, era el momento de que Briles se fuese a casa.
Para un hombre de la inteligencia y el talento de Briles, el fin de sus días de pelotero activo abrió la puerta a otras oportunidades. Como cantante, Briles ya había grabado un sencillo. Su calidad como orador, hizo que pareciera el candidato perfecto para trabajar como comentarista en los medios. También tenía contactos en Hollywood, lo cual servía la escena para una posible carrera en la actuación. Como bono adicional, Briles tenía un toque de comedia. Hacía imitaciones de las celebridades. Una era la mímica del comediante Paul Lynde, la estrella de Hollywood Squares. La otra era una imitación del Presidente Richard Nixon. Ambas personificaciones producían muchas risas, en el clubhouse y en escena.
Briles destacó en muchas de esas areas, pero su primer amor siempre fue el beisbol, donde comentó juegos para los Piratas y los Marineros de Seattle. Finalmente regresó a los Piratas como director de proyectos corporativos. También hizo muchas actividades para organizar la asociación de antiguos peloteros del equipo, junto con Sally O’Leary, quien falleció a principios de este año. Nellie y Sally hicieron del grupo de antíguos peloteros de los Piratas uno de los mejores del beisbol.
Briles continuó su buen trabajo a través de los primeros días de 2005. En febrero de ese año, asistió en Orlando Fla., al torneo anual de golf de los antíguos peloteros de los Piratas. Nellie no solo ayudaba a organizar el evento; le gustaba participar en el torneo. Mientras jugaba golf, Briles de pronto colapsó. Sufrió un ataque cardíaco masivo, uno que se llevó su vida a los 61 años de edad.
La muerte de Briles devastó al beisbol, desde la comunidad de Pittsburgh hasta quienes lo conocimos en Cooperstown. Hacía solo cuatro años que había conocido y entrevistado a Nellie, quién parecía tan vibrante y lleno de vida como cualquiera.
Más de una década después, todavía lamento no haber tenido la oportunidad de reunirme con Nellie en una segunda ocasión. Sin embargo, fui muy afortunado de haberlo conocido, de conocer su admiración por Maz y profundizar sobre su carrera como jugador activo. Cuando alguien construye una primera impresión tan fuerte como lo hizo Nellie, esta se mantiene por siempre.
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Bruce Markusen es el gerente de Digital and Outreach Learning at the National Baseball Hall of Fame. Ha escrito siete libros de beisbol, incluyendo biografías de Roberto Clemente, Orlando Cepeda y Ted Williams, y A Baseball Dynasty: Charlie Finley’s Swingin’ A`s, el cual fue premiado con la Seymour Medal de SABR.
Traducción: Alfonso L. Tusa C.
sábado, 1 de julio de 2017
El Último de Aquellos Héroes.
Siempre tuve curiosidad por el aspecto interno del equipo venezolano que ganó el campeonato mundial de beisbol aficionado en 1941, en La Habana, Cuba. Por supuesto también me interesaban los detalles de los juegos y las anécdotas que vivieron las personas mientras intentaban seguir por radio las incidencias del torneo, pero mi conexión principal con ese equipo residía en mi obstinación por saber lo que ocurría cuando los peloteros compartían en el dugout antes, durante y después de los juegos.
Desde que empecé a seguir el beisbol, una de mis intrigas más profundas tenía que ver con los campeones de 1941. Uno de los juegos que más analicé fue la victoria 5-2 ante México el 5 de octubre de 1941. Los manitos le marcaron una rayita a Daniel Canónico en el segundo episodio y luego se desarolló un duelo de pitcheo hasta el séptimo episodio, cuando el primera base zurdo, José Pérez Colmenares negoció boleto ante el pitcher Canchola, luego Luis Romero Petit despachó doblete a la derecha y el right fielder, Prieto, lanzó abierto hacia el plato, por lo que el receptor Cervantes se lanzó sobre los ganchos de Pérez Colmenares y resultó cortado en una de sus piernas. Romero Petit avanzó hasta tercera base con la jugada. Luis Flores sustituyó a Cervantes en la receptoría. Luego Héctor Benítez Redondo conectó elevado profundo al guante de Herrera en el jardín central, bueno para remolcar al pisa y corre a Romero Petit. Venezuela marcó tres carreras más en el noveno, y México solo pudo marcarle una más a Canónico en el cierre de ese episodio.
La noticia del deceso de Luis Romero Petit este jueves 29 de junio de 2017, me hizo revivir todas esas jornadas de revisiones bibliográficas en la hemeroteca, lecturas de revistas y recortes de periódicos de mis hermanos mayores y una particular excursión doméstica a un baúl lleno de periódicos amarillentos y olor a naftalina y alcanfor; mi abuelo se molestó mucho porque decía que los niños no debían registrar esos trastos tan viejos. “Si te llegas a enfermar, a quien van a culpar tu abuela y tu mamá es a este que ves aquí, de eso tengo experiencias infinitas para hacer varios libros”.
Me impresionó mucho que abuelo tomara en sus manos el delicado papel amarillo de la reseña de la reseña de la derrota de Venezuela ante República Dominicana 4-2, el 15 de octubre de 1941. Lo escuché murmurar algo así como: “Este es el juego del que siempre hablaba Andrés Eloy Blanco cuando pasaba por la calle Ayacucho”. Quise preguntarle por ese juego pero en vez de eso le hice varias preguntas sobre las dos victorias de Canónico ante Cuba, principalmente la del 17 de octubre de 1941. En el cierre del primer episodio, Pérez Colmenares sonó imparable al centro y Romero Petit siguió con linietazo a un costado del inicialista Cuervo que pasó hasta el jardín derecho. Benítez Redondo conectó sencillo impulsor al centro. Chucho Ramos la rodó por el campocorto con lo cual forzaron a Benítez Redondo en segunda y Romero Petit llegó hasta tercera base. En el turno de José Antonio Casanova, Romero Petit se vino hacia el plato; Moreno lanzó a tercera y Ordeñana persiguió al corredor en vez de buscar el out con el catcher Fleitas y Romero Petit le ganó la carrera. Abuelo me dijo en medio de un estornudo, que esa victoria había sido más importante que la del 22 de octubre de 1941.
Muchos años después, mientras me daba instrucciones para que no lo fuese a cortar mientras lo afeitaba en la convalescencia de la enfermedad que le arrebató la vida, abuelo me contó de sus conversaciones con el poeta Andrés Eloy Blanco bajo el almendrón de la calle Ayacucho de Cumaná. El tema más recurrente era aquella derrota ante los dominicanos en el Campeonato Mundial de 1941. “Siempre le quise preguntar a Andrés Eloy, como sabía él con tantos detalles y precisión, lo que había ocurrido en el dugout venezolano después de ese juego. Pero él hablaba con tal propiedad y emoción sobre el ambiente sombrío y triste del equipo, que terminé por creerle la historia de que Luis Romero Petit fue quien se encargó de pasar la página, de levantar el ánimo y con dos palmadas enérgicas dijo, que aun faltaba torneo, que en la vida se gana y se pierde, que lo más importante es levantarse y seguir dando lo mejor. Poco a poco cada uno de los peloteros levantó la mirada y asomaron el rictus de una sonrisa”. Me quedé mirando las arrugas de su rostro, no se si estaba más sorprendido por no haberle cortado la cara, o por lo fantasmal de la historia de Andrés Eloy.
Con Romero Petit se va la grandeza de la gallardía, la magia de la mística, la intensidad de la épica. Nos deja la referencia de recordar que somos capaces de grandes logros cuando nos enfocamos y nos escuchamos.
Alfonso L. Tusa C.
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