viernes, 6 de octubre de 2017
Un centenar de anécdotas...en el centenario del Magallanes (VII)
61.- Duane Josephson y su entrega: Durante la temporada 1966-67, muchas veces escuché a mis hermanos celebrar las actuaciones de este pundonoroso receptor quien venía de ser jugador más valioso en la Pacific Coast League (AAA). Los días que más los escuché elogiar el trabajo de Josephson fueron el 20 de noviembre cuando Isaías “Látigo” Chávez maniató a los Tigres de Aragua 2-0 en su reducto del José Pérez Colmenares, en 9 innings, solo permitió 2 imparables, y concedió 2 boletos. Luego el 11 de diciembre de 1966, Graciliano Parra dominó 1-0 a los Leones del Caracas, en 9 innings, solo permitió 2 imparables y dos boletos.
62.- Un relevista sin wind-up: El primero de enero de 1974 fue un día que se tornó oscuro a partir del mediodía, en ese momento llegaron a casa mis amigos y me comentaron que Mark Weems, el catire melenudo, que lanzaba sin wind-up y se había convertido en el cerrador por excelencia del Magallanes, había fallecido ahogado en las playas de Patanemo, Carabobo. El pitcher estadounidense había ido con sus compañeros de equipo Wayne Garland, Bob Bailor y Don Hood a celebrar el año nuevo en la playa y aparentemente sufrió una embolia mientras se bañaba. Aún sin participar en el resto de la temporada Weems compartió el liderato de juegos salvados (11) con el cubano Carlos Alfonzo de Águilas del Zulia.
63.- Carlos Tovar Bracho, gerente deportivo: Durante la transmisión de los playoffs de grandes ligas en 1969 por RCTV, Tovar Bracho siempre comentaba emocionado cada vez que Tommie Agee iba a batear por los Mets de Nueva York, que ese pelotero había jugado con Magallanes en la temporada 1965-66, cuando él era gerente deportivo de los Navegantes.
64.- La gema de Johnny Mackinson: El 19 de octubre de 1952 los Navegantes del Magallanes enfrentaron por primera vez a los Leones del Caracas en el estadio de la UCV. El juego llegó igualado 1-1 al décimotercer inning. Por 10.2 episodios Mackinson mantuvo sin imparables a los melenudos hasta que Alfonso Carrasquel rompió la magia. Magallanes marcó 9 anotaciones en la apertura del inning 13. Mackinson laboró las 13 entradas, solo permitió una carrera inmerecida, 3 imparables, 4 boletos y ponchó 6. Por Caracas perdió Jehosie Heard con relevos de Luis “Mono” Zuloaga y Julio Bracho.
65.- Clemente Álvarez, el implacable: Siempre una de las bases de un equipo contendor reside en contar con un gran receptor defensivo, en el Magallanes de mediados de la década de 1990, ese receptor fue Clemente Álvarez, una muestra de ello fue lo ocurrido el 2 de enero de 1994 en el inicio de la ronda semifinal ante los Leones del Caracas. Clemente retiró tres veces en segunda base al veloz Roger Cedeño (en el primero, tercer y octavo innings) para mantener a raya cualquier rebelión caraquista en ruta a una victoria 3-1 que se apuntó Juan Carlos Pulido con relevos de José Villa y John Hudek. Urbano Lugo cargó con la derrota con relevos de Ugueth Urbina, Omar Daal, Doug Strange y Jerry DiPoto.
66.- La noche de Graciliano: Hasta que me decidí a realizar una revisión hemerográfica, comprobé porque unos cuantos seguidores del beisbol consideran aquel juego del 15 de octubre de 1965, la mejor inauguración de LVBP. Ese día el Magallanes fue home club en el estadio Universitario, el manager George Noga le entregó la pelota al derecho zuliano Graciliano Parra, en condiciones normales el abridor de ese juego hubiese sido Isaías “Látigo” Chávez, solo que en esa oportunidad el Látigo aún discutía su contrato con la directiva magallanera. Por los Tiburones de La Guaira abrió el también derecho Darrell Brandon. Durante los primeros siete episodios, Graciliano solo había concedido boletos a Ángel Bravo para iniciar el juego y a Graciano Ravelo en el tercer inning, además golpeó a José Herrera en el quinto. El inicialista Oswaldo Blanco ante roletazo intenso de Ravelo y el campocorto Mike Andrews frente a rodado peligroso de Luis Aparicio, ejecutaron jugadas brillantes. El juego llegó al noveno inning 0-0 con Parra y Brandon forcejeando en un gran duelo de pitcheo. En ese episodio, Graciliano ponchó a Bravo. Luego Aparicio descargó una línea con etiqueta de extrabase entre el jardín central y el derecho, entonces Leopoldo Tovar se lanzó a todo lo largo de su humanidad y capturó la pelota para la mejor jugada de la noche. Con el público de pie, Parra dominó a José Cardenal con globo a segunda base y sus compañeros de equipo lo levantaron en hombros de regreso al dugout en medio de una ensordecedora y larga ovación. En el décimo inning, luego de los outs de Jim Wynn y John Bateman, José Martínez bateó línea imparable sobre segunda que acabó con el no-hitter, a continuación Herrera soltó imparable en jugada de bateo y corrido para llevar a Martínez hasta la antesala. Entonces los escualos intentaron un doble robo y Martínez fue retirado en el plato en buena jugada entre el camarero Marv Breeding y el receptor Owen Johnson. Los Navegantes dejaron sobre el terreno a los Tiburones mediante imparable de Victor Colina (cf) que remolcó a Andrews. Graciliano había perdido el sin hit pero mantuvo el blanqueo para ganar 1-0 en 10 episodios.
67.-Tres cañones en los jardines: En la temporada 1983-84 pensé varias veces que podía estar en presencia al menos del trío de jardineros magallaneros con más asistencias en la historia. Me parecía que en cada juego tanto Billy Hatcher (lf), Joe Orsulak (cf) o Benny Distefano (rf) hacían out a cualquier corredor que osara tomar una base adicional. Recuerdo muchos tiros desde los jardines para hacer outs en el plato. De seguro eso fue importantísimo en la primera clasificación del Magallanes en cinco años.
68.- Terry McDuffie, El Dandy: En la temporada 1949-50, vino con los Navegantes un pitcher importado de nombre Terry McDuffie quien tenía una clausula muy particular en su contrato: cada vez que ganara un juego la directiva debía comprarle un traje de casimir, para esa época cada uno costaba 200 bolivares. De cuatro juegos que lanzó, McDuffie ganó tres, no perdió y su efectividad fue de 1.86.
69.- Ramón Hernández se echó al hombro al Magallanes: En la serie final de la temporada 2013-14 versus Caribes de Oriente, tanto Mario Lisson, como Pablo Sandoval y Jean Machi fueron fundamentales para los Navegantes, pero resultó Ramón Hernández con su descomunal bateo (4-3 con tres empujadas en el primer juego y 5-4 con 6 empujadas en el quinto) quién fue el jugador más valioso de la serie para llevar al Magallanes a su duodécimo campeonato en LVBP.
70.- Benito Malavé, relevista del año: En la temporada 1991-92, Malavé se metió entre los mejores relevistas magallaneros de la historia, ese año cada vez que venía del bullpen hasta el montículo se escuchaba la gaita “San Benito”. De sus 35 presentaciones como relevista 14 fueron salvados, 5 fueron victorias, 2 derrotas, solo permitió 29 imparables en 38.2 innings lanzados y su efectividad fue de 1.40.
Alfonso L. Tusa C.
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